SONRISAS: En serio, qué difícil es encontrar sonrisas en nuestro país después de la semanita “caliente” que vivimos. Y no me refiero a los negocitos de apuestas de Jorge Hank Rhon, sino a la temperatura política que ya está dejando sentir por toda nuestra geografía. Y lo peor de todo es que no sólo la política parece un hervidero de grillos, hasta en el fútbol soccer metió la cola el diablo porque cinco jugadores de la Selección Nacional que disputan la Copa de Oro en Estados Unidos (“Sinha”, Edgar Dueñas, “Maza” Rodríguez, Memo Ochoa y “Hobbit” Bermudez) arrojaron positivo por clembuterol en un examen antidoping. Ahora estos pobres cinco desdichados tienen que encomendarse a todos sus santos porque la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) amenaza con arruinar sus carreras.
A mí esto ya ni me espanta, porque por desgracia casi todos los asuntos del país se manejan con intereses y dobles caras. Ya ven lo que pasó en el caso de Hank o los desafortunados discursos del presidente Felipe Calderón en Estados Unidos contra el viejo sistema (¿el PRI?); amén del récord de muertes violentas en Monterrey, incluidas las dos de los guardaespaldas del gobernador Rodrigo Medina, aparentemente en represalia por la acción conjunta de los mandatarios estatales por implementar el plan “CONAGO 1”. En fin… de verdad hay poco para sonreír.
RISAS: Las que nadie pudo disimular tras la conclusión del caso del obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda, con relación al litigio en que se vio involucrado por un dizque robo de una importante colección de arte que en vida fue propiedad de Doña Olga Azcárraga, y todo por un supuesto préstamo de 130 millones de pesos que habría hecho el prelado a la señora Azcárraga. Ahora resulta que la resolución de la Corte salió favorable al Obispo, no sin antes detonarse varias incógnitas: ¿Cómo es posible que un prelado de la Iglesia Católica pueda de su peculio hacer un préstamo de 130 millones de dólares? De verdad es increíble, pero así se las gastan los responsables de procurar y administrar justicia en el país. Tan sólo hay que escuchar lo que el abogado de la familia Azcárraga (Javier Olea) le dijo en entrevista radial al periodista Joaquín López Dóriga para darnos cuentas que aquí no sólo hay gato encerrado. ¡Qué desvergüenza!
CARCAJADAS: Pero de angustia, al ver la campaña que se está instrumentando en los Estados Unidos para que los gringos no visiten México en plan de turismo. Campañas en todos los medios, pero sobre todo en el estado de Texas, en donde su publicidad dice: “Nuestro mensaje es simple seguridad: Eviten viajar a México durante las vacaciones de primavera, para seguir con vida” y en una nota de uno de los diarios más influyentes se de la Unión Americana (el “Wall Street Journal”) se le que el año pasado 107 estadounidenses fueron asesinados en México, pero en ningún lado especifica cuántos de estos muertos eran turistas o cuántos de éstos eran parte activa de la guerra contra las drogas. Lo que si me queda claro es que si la industria turística cae, la economía mexicana sufrirá seriamente, ya que los recursos que produce son los segundos en monto después del petróleo, así que de verdad dejaré las carcajadas para la próxima.
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