Que día tan difícil.
Que difícil es describir tantos sentimientos que a la vez no se pueden explicar en palabras.
Hoy marchamos por la vida desde Aushwitz hasta Birkenau, una marcha inolvidable.
Hemos conocido varios lugares que nos han dejado impresionados, ni las palabras son suficientes para explicar como nos hemos sentido.
Sentimientos encontrados que pasan en mi mente.
Hoy, en lo personal, me sucedieron varias cosas que les quiero platicar.
Al momento de llegar a Aushwitz me empecé a sentir encerrada. Un sentimiento de ahogo.
Cada barraca me produjo un sentimiento diferente, algunas mas fuertes que otras, pero al final todo es lo mismo, dolor y tristeza.
Me deja un vacío dentro de mi, dentro de mi corazón, tantas preguntas que no tienen respuesta.
Después de que conocimos el campo de concentración de Aushwitz, inició la marcha que tanto esperábamos, salimos rumbo a Birkenau.
Hoy yo marche por mis bisabuelos Lola y Seveck Lasman Z”L.
Hoy yo marche por todos aquellos que cayeron, que no pudieron cumplir sus sueños.
Hoy yo marche por todos aquellos que nunca se rindieron.
Hoy yo marche por todos los que sobrevivieron.
Al escuchar el shofar produjo en mi un sentimiento de libertad, paz y seguridad. Empezamos a marchar por la vida.
Lagrimas se me salían de alegría y de tristeza.
En honor a mis bisabuelos Lola y Seveck Lasman Z”L, dejo hoy en las vías del tren de Birkenau una piedra de corazón que lleva el nombre de mi bisabuelo. El tuvo la mala suerte de estar ahí, pero gracias a que nunca se dio por vencido, con su lucha logro sobrevivir.
Es un honor para mi poder estar aquí conociendo nuestra historia.
Hoy somos libres, hoy podemos ser nosotros sin miedo a que nadie nos lastime, hoy gritamos Am Israel jai, hoy aquí estamos.
Hoy yo marche por la vida.
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