En aquel tiempo me inscribí en el IPADE en una serie de cuatro o cinco sesiones breves de Filosofía.
Este articulo trata de ese pasado hecho, que después sería imborrable en mi vida; fue mi inicio en ese caudaloso, maravilloso, río que es la Filosofía…
Fue en la primera o segunda sesión que se hablo del ERROR.
La afirmación fue certera, concluyente, el conferencista Francisco Rossell:
– El error es algo preciso, infalible, es certero.
Es lo que recuerdo, ojala y me acordara de algo mas…
Hago un esfuerzo mental:
Por el error se llega a la certeza.
Por el error se conquista el triunfo.
Es el error marcador indeleble de cómo no se hacen las cosas.
Ese volver a empezar después del error es ventajoso, porque lleva implícita la experiencia de la cual se carecía en un principio…
Capitalizar el error es signo de inteligencia y humildad; factores necesarios para mantenerse en la cima.
Fuimos hechos para equivocarnos como requisito previo para llegar a algo mejor.
La Perfección es una meta remota e imposible para el ser humano; pero la lucha sigue porque así esta escrito…
¡Si siete veces te caes, levántate ocho!
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