El reclutamiento terrorista en Pakistán

Para la gran mayoría la palabra educación es sinónimo de progreso, de mejor futuro, de instrucción. Sin embargo, en países como Pakistán, en algunos sitios particulares ocurre que el iniciarse en un centro educativo podría llevar a una catástrofe en la cual varias vidas podrían terminar dañadas.

Terrorismo en zonas tribales de Pakistán

La invasión en Afganistán por parte de Estados Unidos el 7 de Octubre del 2001, provocó que millones de personas se refugiaran en el país vecino de Pakistán. Entre ellas se encontraban miembros del gobierno afgano, conocido como los talibanes, como también civiles. Luego de varias semanas de intensa actividad bélica en Afganistán, el país americano logra el control de Kabul, la capital del país, con intención de propagarse en las zonas del sur donde aún existían grupos resistentes a la invasión.

Varios años después de haberse instaurado a la fuerza un gobierno en Afganistán, y con tropas de más de 40 países pertenecientes a la OTAN, promovió la dificultad por parte de la resistencia de reagruparse dentro mismo del país afgano. Esto trajo como consecuencia  una fuerte actividad de reagrupamiento de fuerzas talibanes dentro de tierras pakistaníes.

Dentro de Pakistán existen varios grupos terroristas, como también grupos de resistencia frente a la invasión estadounidense en Afganistán, dispuestos a generar terror en dicho país. Una de las zonas con más influencia terrorista dentro de Pakistán son las áreas tribales, denominadas FATA (Federally Administrered Tribal Areas), considerado como uno de los lugares más peligrosos del mundo.

FATA es un área semi-autónoma en la frontera con Afganistán al noreste de Pakistán. Es una zona de siete agencias tribales administradas por agentes políticos, con un tamaño aproximado de 27 mil kilómetros cuadrados y una población de más de 3 millones de habitantes. Posee un gobierno federal y son aplicadas leyes especiales FCR  (Frontier Crimes Regulations); en donde no son aplicables la acción de la Suprema Corte de Justicia ni la Alta Suprema Corte de Justicia de Pakistán. Una zona montañosa, completamente alejada de las grandes ciudades.

Se ha comprobado que dentro de FATA se encuentran grupos talibanes de Afganistán, miembros de Al-Qaeda con campos de entrenamientos terroristas, así como un grupo que ha entrado en la lista de grupos terroristas de Estados Unidos denominados popularmente como los talibanes de Pakistán y formalmente como Therik-i-Taliban Pakistán (TTP); este último tiene un prontuario de grandes acusaciones terroristas dentro del país.

Pobreza

Según el sitio oficial de FATA, existen pocas oportunidades laborales disponibles, en donde la mayoría son en la agricultura en pocas tierras fértiles de los valles, cría de ganado y pequeños negocios locales. Según Global Security el 60% de la población vive bajo la línea de pobreza, con un promedio de salario de U$D 250 por año, donde solo el 17% de la población sabe leer y escribir.

En FATA, como a lo largo del país, existen las escuelas del gobierno y las madrazas (seminarios islámicos). Es necesario tener uniformes y comprar libros de estudio para participar de las escuelas del gobierno, en cambio las madrazas son gratuitas, otorgan comida a los niños, alojamiento, ropa, y aseguran una educación islámica.

Allí, las madrazas son consideradas un semillero religioso en un sitio en donde hay fuerte presencia terrorista. “La pobreza está forzando a la gente a enviar a sus hijos a las madrazas”, indicó el ministro de educación de Jyber Pajtunjwa, Muhammad Atif.

Existe un círculo vicioso en donde  el terrorismo provoca cierre de comercios, fábricas y demás tiendas, así como la caída de los ingresos por la agricultura provocando un deterioro económico de la población, obligando a las familias a enviar a sus hijos a las madrazas.

Según el departamento de educación en FATA hay 585 madrazas con poco más de 14 mil estudiantes, y habiendo 750 escuelas alrededor que han sido destruidas por los talibanes desde el 2005.

Reclutamientos

Según el servicio de inteligencia afgano, los mullah talibanes están reclutando niños para realizar ataques suicidas en contra de las tropas de la OTAN, oficiales del gobierno y todo aquel que se encuentra en relación con el gobierno afgano. Declararon que han capturado varios niños y jóvenes intentando cruzar por el oeste de Afganistán con objetivos de realizar este tipo de ataques.

Arshad Khan, un joven que vivió durante un tiempo en una madraza en FATA y volvió a su casa luego de haber sobrevivido a un ataque de drones por parte de Estados Unidos declaró como Abur Razzaq, un reclutador de atacantes suicidas lo reclutó. Abur Razzaq trabajó para los TTP y para los talibanes afganos reclutando jóvenes para cometer atentados suicidas. Khan declaró como Razzaq comenzó a hablarle sobre la Jihad (guerra santa), y de a poco lo convenció que su más grande objetivo en la vida era convertirse en un atacante suicida, morir y pasar a ser un mártir. Arshad Khan declaró como Abur Razzaq lo llevó a campos de entrenamiento de talibanes en donde había cerca de 40 jóvenes. El objetivo era enseñarles a manipular armas (Kalashanikovs), disparar y manejar explosivos.

El vocero de la milicia de Pakistán, Gral. Akhtar Abbas, declaró que han interceptado mensajes entre grupos terroristas de diferentes ciudades solicitando personas para realizar ataques suicidas. También indicó que el iniciador de esta ola de reclutamiento fue Baitullah Meshud, el fundador de TTP, quien posteriormente falleció en un ataque de drones el 5 de Agosto del 2009. El ataque fue perpetrado por Estados Unidos ordenado por Barack Obama. Meshud, sin pudor, declaró abiertamente estar involucrado en actividades terroristas, aceptando los crímenes cometidos por los ataques suicidas.

Awan, un estudiante de la ciudad de Peshawar, a 400km de FATA,  declaró que en su ciudad no se ve relación entre grupos terroristas y las madrazas, sino por el contrario, las madrazas son sitios seguros en donde funcionan de la forma que deben, brindando una educación islámica.

Sin embargo, aclaró que las zonas tribales, debido a la pobreza que existe, y la libre circulación de terroristas, se encuentran personas que no son capaces de distinguir entre el bien y el mal, teniendo un fuerte desconocimiento de la realidad de la religión musulmana, que se basa en el respeto a todo ser vivo y predica la paz. Por este motivo de desorientación causa la seducción por parte de grupos terroristas y de resistencia al gobierno Afgano que consiguen reclutar miembros con facilidad.