El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), reporta que el 75% de los mexicanos padece fatiga por estrés laboral, superando a países como China y Estados Unidos; dato que genera una pregunta bastante singular: ¿el trabajo enferma?
Weiss (2002), menciona que los eventos en el trabajo tienen un impacto emocional real en los trabajadores: por ejemplo, la creciente presión en el entorno laboral puede provocar estrés y con ello, una saturación física y/o mental del trabajador, generándole diversas consecuencias que no sólo afectan su salud, sino también a su entorno más próximo, ya que crea un desequilibrio entre lo laboral y lo personal.
El estrés laboral hace su aparición, a partir de diferentes factores de riesgo, tales como:
- La naturaleza del trabajo: exceso o carencia de habilidades para el puesto, ritmo de trabajo acelerado, horarios estrictos e inflexibles, malas condiciones laborales, ambiente laboral conflictivo, exposición a acontecimientos traumáticos severos o actos de violencia laboral, por el trabajo desarrollado y otros
- La naturaleza del trabajador: personalidad, manejo de emociones, inadecuado ciclo del sueño, alimentación deficiente y escasez de herramientas de adaptativas.
- Los factores psicosociales: finanzas personales, tráfico vehicular, problemas de pareja o familiares.
De acuerdo con Moreno y Báez (2010) los factores de riesgos y psicosociales van a generar consecuencias en la salud del trabajador tanto a nivel físico como mental; se dan casos en los que promoverá el consumo de sustancias, junto al desarrollo de trastornos psicosomáticos (alteraciones físicas y fisiológicas que tienen un origen emocional).
Así mismo, se presentan consecuencias en el desempeño y actitudes ante la empresa tales como: insatisfacción laboral, ausentismo, rotación, clima laboral conflictivo y baja laboral y por supuesto se reportan costos económicos como: accidentes de trabajo, pérdida de materiales, bajo rendimiento y baja productividad.
Afortunadamente Staw, B.; Sutton, R. y Pelled, L.(1994) concluyen que para combatir el estrés laboral es indispensable trabajar en la capacidad de manejar eficazmente las emociones en el lugar de trabajo, ya que ayuda a los empleados a mantener el bienestar psicológico. Esto indica que la reducción del estrés y la protección de la salud podrían lograrse no solo disminuyendo los factores de riesgo implicados, sino también aumentando los recursos personales de los empleados.
Por lo tanto, las emociones positivas en el lugar de trabajo ayudan a los empleados a obtener resultados favorables que incluyen logros personales, mejor desempeño laboral y un contexto social de mayor calidad. Por lo que si eres empleado y te interesa sentirte mejor en el lugar donde estás trabajando o bien si tienes a cargo una empresa y te importa obtener mejores rendimientos, en Maayan Hajaim contamos con profesionales que pueden promover estrategias para el manejó de estrés y el desarrollo de la inteligencia emocional.
Bibliografía
- Moreno B., y Báez C. (2010). Factores y riesgos psicosociales, formas, consecuencias, medidas y buenas prácticas. Instituto Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo (INSHT). Disponible en: http://www.insht.es/InshtWeb/Contenidos/Documentacion/PUBLICACIONES%20PROFESIONALES/factores%20riesgos%20psico.pdf.
- Staw, B.; Sutton, R. y Pelled, L. (1994). Emoción positiva del empleado y resultados favorables en el lugar de trabajo. OrganizationScience, Vol. 5, No. 1, pp. 51-71
- Weiss, H. (2002). Deconstructingjobsatisfaction. Separatingevaluations, beliefs and affectiveexperiences. Human Resource Management Review, Vol.12, 173-194.
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