Gal Gadot, la actriz que encarna en la pantalla a Wonder Woman, fue instructora de combate del ejército israelí. Y hace unas horas publicaba este lamento por el pueblo de Israel.
— Gal Gadot (@GalGadot) May 12, 2021
Miles de respuestas han pedido la cancelación de la actriz, incapaz de nombrar a Palestina, incapaz de solidarizarse con las decenas de víctimas árabes, incapaz de criticar la masacre israelí y el tremendamente desigual poder bélico y superioridad armamentística y económica de su país respecto a los palestinos a los que está robando el territorio.
– ¿Puedo ser como tú? – Puedes ser lo que quieras. Excepto si eres palestino.
Otros miles han salido en su defensa. Porque Israel ha conseguido que cualquier crítica a su política sea calificada de nazismo.
La defensa es fácil… simple… y emocional.
Antisemita.
Siempre. Que viene a equipararse con nazi.
Cualquier crítica contra Israel -como gobierno- te convierte automáticamente en antisemita y nazi. Es el muro de contención que ha logrado edificar el gobierno israelí contra el que chocan todas las opiniones contrarias hacia su política militar, de ocupación, económica, sanitaria o social hacia el pueblo de Israel.
Y entonces, ¿ellos qué son, ultraortodoxos antisemitas, judíos nazis?
Mmm…
(cáptese la ironía, por favor)
Denunciar la barbarie no significa ser antisemita.
Sólo significa denunciar una barbarie.
Aquí tenéis a decenas de miembros de la comunidad ortodoxa judía de Nueva York, denunciando la crueldad de la operación militar del gobierno de Israel contra Palestina.
Judíos ortodoxos marchan en Nueva York en solidaridad con Palestina. pic.twitter.com/svTwljuUVA
— Palestina Hoy (@HoyPalestina) May 12, 2021
Además, llamar antisemita a cualquiera que alza la voz contra la vulneración de los derechos humanos por parte de Israel es, además, de una incultura galopante. Los semitas son las personas que forman parte de los pueblos árabes y hebreos de la zona. Los sinonistas son los que siguen los postulados del movimiento político que promovió la creación y expansión -que prosigue a día de hoy- del estado Israelí en territorio palestino.
64 palestinos -entre ellos 14 niños- han fallecido en las últimas horas de una crisis -la peor en siete años- que ha iniciado Hamás -ante la fragilidad del líder palestino Abbas-, y a la que Israel -en propia defensa- ha respondido desplegando su abrumadora superioridad militar. Es el último acto del gobierno de Netanyahu, que lleva años aplastando a Palestina con políticas que violan el derecho internacional y que siguen creando un caldo de cultivo para el odio.
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