¿Quién es quién? Netanyahu Lapid o Lapid Netanyahu
Me fui unos días de vacaciones y al regresar me encuentro que todo está igual, me refiero a la confusión que despierta el nuevo ministro de finanzas, objeto de esta serie, Yair Lapid. Hace muchos años que no encuentro tanta distancia entre lo que dice un ministro antes de las elecciones y lo que hace después de las elecciones. Digo que solo es una distancia virtual, pues para mí era claro que lo que decía no era más que tirar harina a los ojos de los electores y sin duda ha logrado enceguecer a una enorme cantidad de votantes.
No es mi deseo entrar a detallar las medidas que van a tomar o dicen que van a tomar, de eso se ocupa la prensa profesional, la propaganda institucional y los interesantes de un lado o del otro.
Todos tienen razón, esto es un desastre. No hay medidas que realmente representen un cambio, el cambio prometido, desde ninguna perspectiva pues este gobierno por definición sigue siendo el gobierno de unos pocos, de minoría.
Los asentamientos son una minoría y el cantito que son la defensa del país es el mismo cantito que los kibutzim eran la defensa del país. Desde que el Licud, con Begin, tomaron el gobierno en el año 1977 los kibutzim perdieron el apoyo gubernamental y ellos ya no son lo que eran en el panorama israelí y a pesar de ello, Israel existe, fuerte y soberana. No me impresioné que afectaran sustancialmente los presupuestos destinados a los asentamientos.
La defensa del país sigue estando en manos del ejército y sus presupuestos crecen en forma progresiva a lo largo de los años. Es increíble pero ya estamos cerca de preguntarnos ¿para qué? Los datos que han publicado sobre el crecimiento del presupuesto en los últimos 7 años son increíbles e insoportables.
“Bitajon” se convirtió en la palabra mágica para justificar todo, incluida la pobreza y la pésima distribución de los presupuestos. Estos días se ha publicado “Israel tiene el porcentaje de pobreza más alto de la OCDE ”
Titulo que nos lleva a preguntar, que estamos defendiendo? ¿A quién estamos defendiendo?
Todos están escandalizados por los pocos impuestos que pagan los ricos y sin embargo no se prevén cambios sustanciales. Muchos de los ricos han manifestado que están dispuestos a pagar más impuestos o que sienten que deben pagar más impuestos. Así se han expresado en el mundo y también en Israel y no solo ahora. ¿Por qué no se legalizan los cambios? No hay explicación racional.
Impuestos escalonados a la herencia, al patrimonio, al movimiento financiero, no solo que sería una cosa justa sino sería una forma elegante de combatir al capital negro o por lo menos, lograr que paguen impuestos corrientes. El que hizo un gran capital por no pagar impuesto al comprar una casa o casas o edificios ya está registrado y que esos bienes paguen impuestos, me parece más que legítimo. Una nota mía manifiesta algunas ideas. (mencione este texto en la nota anterior).
El cuarto poder al servicio del poder y del capital. La nota aquella es de julio del 2012, pronto un año e incluye el siguiente párrafo:
El ministro de Finanzas Steinitz dijo:
“Estamos aquí para defender la economía israelí. Vemos lo que está sucediendo en los EE.UU., en Gran Bretaña, en España y en Grecia y no vamos a permitir que eso suceda aquí.”
Eso dice el Ministro de Economía del Primer Ministro de Israel Benjamin Netanyahu.
El peor gobierno que tuvo Israel en su historia, por lo menos en su historia moderna, el que ha empobrecido al pueblo, liquidado la clase media, enriquecido a los ricos y por las últimas medidas da otra vuelta más a la tuerca, lo peor es que todos aceptan.
Y ¿por qué va a cambiar ahora? Todo lo contrario, hemos visto últimamente una publicación sobre ciertos gastos, insoportables a mis ojos, del primer ministro, como la suite en China, la cama matrimonial en el avión a Londres y seguramente otras cosas que no vemos. ¿Estamos locos? ¿Hemos perdido la cordura?
En el mismo año, octubre del 2012 escribí a los miembros del parlamento (una selecta lista de miembros del parlamento a los que suelo manifestar que piensa el pueblo (yo) que hemos perdido todas las proporciones cuando Peri manifiesta que él es clase media, aunque sus ingresos en los últimos años han sido 100 millones de shekalim. Como presidente de la compañía de celular Celcom no hizo ningún servicio al público y las increíbles ganancias recibieron los dueños de la empresa y luego como presidente del banco Mizrahi, tampoco no hizo nada para el público, todos sabemos cómo los bancos engordan sus arcas a cuenta del público y benefician, nuevamente, a los grandes capitalistas.
¡Ah! ¿quién es Peri? Uno de los ministros del partido de Lapid.
¿Nada ha cambiado?, me corrijo, nuevamente ante problemas económicos el tam tam de la guerra aumenta el ritmo y el ruido. Como figura en una nota que nada tiene que ver con esto:
Cómo evitar que la guerra sea la única solución para reflotar la economía (17.09.2010) (ayer tanto Israel como Siria reconocieron oficialmente haber atacado el uno al otro y si bien los daños fueron menores el mensaje es claro).
Seguiremos luchando para sobrevivir, esperemos lograrlo pues cuanto tiempo y ¿cuántas fuerzas se pueden invertir?
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