El desarrollo es una cuestión global que requiere de una atención permanente, de grandes recursos y serios esfuerzos políticos para potenciar sus beneficios y reducir el impacto negativo de las recientes crisis (escasez de alimentos, cambio climático, energía, etc). La importancia de ello se incrementa dado que estas crisis dañan sobre todo a países en vías de desarrollo, muchos de los cuales sufren de extrema pobreza y hambruna.
Durante los últimos 54 años Mashav —la Agencia Internacional de Cooperación y Desarrollo de Israel—, ha compartido su experiencia y conocimientos con diversos países alrededor del mundo.
Su labor ha estado guiada por el supuesto básico de que el trabajo de desarrollo es integral y orgánico. Es imposible concentrar esfuerzos en una sola área, como la de seguridad en alimentos, sin proveer la atención merecida a los cuidados de la salud, a la construcción de comunidades y a la educación. Solamente a través de un programa de desarrollo sustentable y comprensivo pueden obtenerse resultados concretos. Como ningún país o agencia de ayuda pueden abordar por si mismos las causas que conllevan a la extrema pobreza, la necesidad de coordinar y combinar esfuerzos y recursos es esencial.
Las prioridades principales israelíes han sido: aliviar la pobreza, la provisión segura de alimentos, el empoderamiento de las mujeres y el mejoramiento de servicios básicos de salud y de educación. Consecuentemente, los principios básicos de Mashav son: enfocarse en áreas donde Israel tiene ventajas y experiencia acumulada; el desarrollo de habilidades humanas y el entrenamiento; actuación de acuerdo a los principios y estándares internacionalmente reconocidos; consulta activa con socios locales; actividades en pequeña escala con el involucramiento e inclusión de las comunidades locales.
Como parte de nuestra larga tradición de colaboración “horizontal”, Mashav está adaptándose constantemente, creando nuevos programas y fortaleciendo lazos para encarar nuevos desafíos.
Hasta el momento, Mashav ha firmado acuerdos de colaboración con gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, organismos internacionales y comunidades judías, con el propósito de obtener la máxima coordinación en el desarrollo de actividades internacionales. Entre los países asociados con Mashav se encuentran: Alemania, Canadá, Chile, Dinamarca e Italia, así como organizaciones internacionales como la OEA (Organización de Estados Americanos), la UNICEF y la UNESCO, entre otros.
El pasado 5 de septiembre Israel firmó una declaración de intento de cooperación para brindar ayuda a Haití y a países emergentes en África. El acuerdo incluye acciones conjuntas en los campos de la agricultura y la irrigación así como en salud pública y género. La implementación del acuerdo será a través de Mashav. Además, Mashav ha sido altamente activo en América Latina contando con becarios de todos los países del continente. Entre las actividades que ameritan atención especial cabe mencionar la que se lleva a cabo estos días en el marco de la colaboración entre Mashav Y Agci (la agencia chilena), que es un curso de educación para niños. Otra actividad importante es aquella organizada por los Clubs “Shalom” de América Latina, formados por ex becarios de Mashav, la cual se llevará a cabo este noviembre en Cartagena bajo el título de La Experiencia acumulada entre los ex becarios en el fortalecimiento de las economías y las sociedades de América Latina.
El valor agregado de todas estas actividades no sólo radica en su aporte al desarrollo global sino también en el fomento de los lazos de la amistad que unen a los pueblos y sociedades.
* Artículo publicado en la columna “Ideas mediterráneas” en Excelsior el 8 de septiembre, 2011. Rodica Radian-Gordon es Embajadora del Estado de Israel en México.
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