Cuando la persona es generosa y dadivosa, se enriquece, como está escrito: Yesh Mefazer Venosaf Od, “Hay quienes reparten y acumulan más”.
Este concepto podría parecernos ilógico, ya que quien reparte su dinero está descontando de su capital. Sin embargo, en los caminos de Dios, esto se maneja de manera diferente: cuando una persona reparte del dinero que tiene, Dios le manda más de lo que repartió.
Dice el Midrash: “Dijo Rabí Abahu: Si ves a un hombre que derrocha su dinero entre los pobres, debes saber que esa persona recibirá mucho dinero, ya que, por el mérito de dar, Dios le mandará más”.
Asimismo, cuando la persona da la caridad, no conocerá la escasez, así como está escrito: Notén Larash En Majzor – “El que da al pobre no conocerá la escasez”.
Sobre esto, dicen nuestros Sabios: “Dijo Rabí Akibá: ´A todo el que da caridad al pobre, nunca le faltará nada. Nunca debemos privarnos de dar. Si en la mañana llega un pobre y le diste unas monedas, y en la tarde llega otro a pedirte caridad, no debes decirle que ya diste en la mañana, sino que deberás darle de nuevo”.
Saludos !
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