Mencionaremos a continuación varios pasos para llegar a la perfección personal y el mejoramiento de nuestras cualidades.
Sin embargo, aunque pareciera muy fácil y podamos pensar que sólo basta con seguir esos pasos, realmente se necesita de trabajo y esfuerzo durante toda una vida.
1. Motivación. Si no estamos motivados, nunca llegaremos a nada. Para cualquier ámbito en la vida, debemos tener motivación a fin de lograr algo. No importa por qué uno está motivado; lo importante es lograr la motivación.
2. Entender qué es lo ideal. Si entendemos que al perfeccionar nuestras cualidades seremos mejores personas, más queridas, más aceptadas por la sociedad, lograremos una mejor vida y, por supuesto, nos haremos queridos por Dios. Esto es algo que nos ayudará a seguir este camino.
3. Conciencia. Debemos estar conscientes a cada momento de cómo estamos comportándonos. Tengamos presente en cada situación de nuestra vida la manera de mejorar y no caer en el error.
4. Conocer el lugar o la situación más fáciles para aplicar alguna buena cualidad. Nuestros Jajamim nos enseñan que no debemos tratar de perfeccionarnos de un día al otro, sino poco a poco. Nuestro comienzo debe ser el escalón más fácil de las escaleras de la vida. Es decir, debemos comenzar con la virtud más fácil que pueda haber para nosotros y luego continuar con las demás.
5. Seguir trabajando con nuestra personalidad y no parar nunca. Perfeccionar nuestras cualidades es un trabajo de toda la vida.
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