Tratando de desligitimizar al islamismo, una película en la que se proyecta a Mahoma como un abusador de niños -entre otras acusaciones innecesarias- para demostrar que esa religión es mala se inauguró hace meses sin que nadie le hiciera caso, pero la reacción se presenta -por casualidad- el 11 de septiembre.
En respuesta, los extremistas del otro lado matan a un Embajador que no solo no tenia nada que ver en el asunto sino que además estaba en Libia tratando de ayudar a los musulmanes locales a muchos de los cuales, gracias a su intervención durante la guerra, les salvó la vida al detener a los ejércitos de Khadafi.
Y así se escribe la historia de la manipulación de masas, que por cierto se da por igual en casi todos los países del mundo- pero que, es un hecho, en el mundo musulmán tiende a ser -actualmente- mas común, más violenta y más sangrienta que en otros países y culturas -como las europeas- donde, hace apenas 60 años estaban matando a millones y quemándonos en hornos.
O sea, que hay que comprender la reacción árabe en su contexto ideológico, tomar las medidas necesarias para protegerse de estos exabruptos políticos disfrazados de horror religioso y buscar la manera de desarmar a los extremistas lo cual requiere el desarmar extremistas de ambos lados aún cuando, es obvio, será más difícil desarmar a los islámicos porque son más y están más protegidos por sus grupos terroristas que, por cierto, nada tienen que ver ni con Occidente, ni con Israel ni con los judíos y son solo expresión de luchas de poder entre saudis e iraníes, shiitas, salafitas y sunnis, y grupos de poder económico que se benefician de este estado de inestabilidad.
Ahora, los extremistas musulmanes “saben” que “”¿todos?”” los occidentales desprecian a su profeta (como se sentirían los judíos creyentes si una película egipcia dijera que a Moisés les gustaban los niños y que todo, blah bla bla…) pero ahora, gracias a esta película que casi nadie había ido a ver al cine los extremistas “saben” (!!) que hay un complot de judíos – porque “todos” los israelíes son judíos -incluyendo a los israelíes musulmanes y cristianos- y “todos” los judíos son iguales – al igual que“todos” los musulmanes son fanáticos, etc. incluyendo a los creadores de la película que no son ni judíos ni israelíes sino mas bien resultaron ser turcos, egipcios y evangelistas!
Por su parte los extremistas islamistas han podido demostrar que siempre se puede contar con su violencia e irracionalidad lo cual seguramente le queda muy claro a las fuerzas armadas seculares egipcias que quizás atizaron el fuego y promovieron la situación para demostrarle a Obama lo que pasa cuando se apoya a la Hermandad Musulmana en contraposición de las fuerzas armadas.(?)
Y nada más para aclarar: Es obvio que la religión más violenta del mundo actualmente es la musulmana, la única que hoy en día envía a sus hijos con bombas explosivas a matar – no solo israelíes (“el enemigo”) americanos (“el Satán”) o judíos (“el origen de todos los males” -incluyendo debemos subrayar el islamismo mismo-) sino también a todos los musulmanes “malos” que para los shiitas son los suni, para los suni los shiitas, para los sufistas son todos los otros y así ad-infinitum todo con el dizque afán de “salvar” al islamismo.
Estas guerras me recuerdan la época las guerras internas en Israel entre lo que hoy llamaríamos seculares (en aquella época conocidos como “los griegos” y los “judíos de verdad”, los Ortodoxos, cuyas luchas internas llevaron a la destrucción del país o las guerras de la Reforma Cristiana en Europa y claro, para salvajismo, la segunda guerra mundial todas en nombre de un Dios o profeta que debe deshacerse de los otros dioses, profetas o seguidores.
Esto lo digo porque el hecho de que los musulmanes sean los portadores del salvajismo en esta década no son mas o menos salvajes de lo que han sido otras culturas por lo que quienes quieren desacreditarlos no tienen que inventar historias ni crear filmes mentirosos u ofensivos sino solamente tienen que limitarse a mostrar lo que hacen y dicen sus extremistas, no hay necesidad ni de inventar ni de ofender, bastante ofensivo es el silencio de sus seguidores ante las masacres ínter islámicas de las últimas décadas.
Afortunadamente estas paginas incluyen siempre traducciones fidedignas y detalladas de todo lo que los gobernantes de Irán, Turquía, Egipto, y todos los otros países árabes y musulmanes le dicen a sus pueblos, en sus mezquitas, en sus periódicos, en su radio y televisión.
Ojalá los gobiernos y los medios dejen de estar reaccionando y sorprenderse cuando un circo de manifestaciones como estas aparecen ‘de pronto’ en las calles del mundo árabe cuando seria mejor que se mantuvieran al día, lean lo que internamente se comunican y provocan entre ellos y así, estén preparados para el estallido o mejor aun, preparados para desinflarlo antes de que explote.
Como siempre, conocimiento es la mejor herramienta de prevención, no cree usted.
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