Juicio a Neo Nazi sin precedentes en Mar del Plata

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En marzo, un tribunal federal en la ciudad costera provincia de Buenos Aires pondrá ocho hombres en el muelle para una serie de ataques violentos contra la comunidad LGBT y las comunidades de Bolivia y el vandalismo antisemita.

Jayson McNamara

  • Buenos Aires Times
graffitis neonazi en Mar del Plata.
Graffitis neonazi en Mar del Plata. Foto: Cortesía AMADI

Por AGUSTINO FONTEVECCHIA

Un tribunal federal de Mar del Plata se prepara para airear los detalles inquietantes, impactantes de lo que los fiscales y activistas en la popular ciudad de vacaciones han etiquetado crímenes “neonazis”.

El juicio público sin precedentes – que comenzará a principios de marzo, y que verá a ocho hombres de edades comprendidas entre 18 y 28 en el muelle – es la culminación de una batalla de 12 meses para calificar una serie de ataques violentos contra la comunidad LGBT local y comunidades de Bolivia, así como una ola de grafiti racista y antisemita, como ideológicamente motivado. Es la primera vez que una banda con rasgos explícitos neonazis se ha enfrentado a un juicio en Argentina.


Los ataques en Mar del Plata comenzaron en julio de 2013 y continuaron durante todo el año 2015. Uno de los principales testigos del juicio es Javier Moreno Iglesias, un activista local que comenzó a elevar la conciencia pública sobre un brote de violencia neonazi aparente contra los trabajadores sexuales trans de la ciudad de 2013.

“Habían golpeado una chica trans a una pulpa, que fue hospitalizada. Tomamos fotos de las víctimas y terminamos en la televisión. Eso era lo que poner las cosas en movimiento,”Moreno Iglesias dijo al  Times,  en una entrevista esta semana.

Poco después, un grupo de neonazis identificó Moreno Iglesias, en las calles, seeminly reconocerlo desde su aparición pública. Ellos comenzaron a amenazar.

“Se dirigieron a mi lugar de trabajo con graffiti nazi como ‘Sieg Heil’ y” marica Judio. Ellos vinieron y cantaron canciones para mí en alemán “, recuerda.

Moreno Iglesias recibió protección policial, pero los delitos de violencia, vandalismo y odio en la ciudad continuaron.

“Se documentó otros casos de violencia y en un punto prácticamente toda la ciudad estaba cubierta con esvásticas graffitied”, recuerda el joven.

Dos casos de comportamiento amenazante contra Moreno Iglesias – que es parte de un grupo de activistas llamado Asociación Mar del Plata de la Igualdad de Derechos (AMADI) – y los incidentes similares de amenazas, golpes y el vandalismo, constituyen 12 de los 13 delitos que Federal de Mar del Plata Corte evaluará 1 del 6 de marzo.

Los fiscales se han reunido más de 100 piezas de evidencia en total para el próximo juicio.

“Una investigación de esta naturaleza siempre debe avanzar con pruebas. La fiscalía ha trabajado de manera muy profesional, en este sentido,”el fiscal jefe de la ciudad Daniel Adler dijo al  Times, .

Adler fue parte de un equipo de fiscales que encabezaron la investigación, con el apoyo del ex fiscal general Alejandra Gils Carbó. El proceso ha disfrutado de un amplio consenso entre los grupos de derechos humanos locales y organizaciones comunitarias judías como la DAIA (Delegación de Asociaciones argentino-israelí).

En declaraciones formales ante los tribunales en 2017, el fiscal destacó cómo locales neonazi “grupos de cabeza por la noche a cazar gente, como la SS hizo en la década de 1940”.

Es la conexión neonazi que hace el juicio de manera innovadora. Fundamentalmente, los ocho hombres que se mantengan de prueba se enfrentan a un cargo adicional de “pertenencia a un grupo que pretende imponer sus ideas por medio de la fuerza … y promover teorías de superioridad racial”.

“PUNTO DE RETORNO”

“El punto de inflexión fue cuando el caso fue elevado a la jurisdicción federal,” el Dr. Ariel Gelblung, el director de la oficina para América Latina del Centro Simon Wiesenthal, dijo al  Times,  en una entrevista.

La organización, conocida históricamente por su trabajo en la localización y el enjuiciamiento de los criminales nazis, hizo campaña por los crímenes en Mar del Plata para ser calificado como ideológicamente motivado, una condición clave que aseguró que el juicio se llevará a cabo ante un tribunal oral.

“Nos preocupaba que el fiscal federal (Juan Manuel Pettigiani) quería simplificar la investigación mediante la eliminación de la carga de pertenecer a una organización criminal,” dijo el Dr. Gelblung. “Sin embargo, los jueces entendieron lo contrario y vio que la investigación tuvo que ascender a un juicio público.”

Los hombres están acusados ​​Gonzalo Paniagua, Nicolás Caputo, Alan Olea (el presunto líder de la banda), Oleksandr Levchenko, Marc Caputo, Franco Giordano y Martín Pozas Spagnolo.

La fiscalía argumentará que operaban en grupos de tres o más y usados ​​armas que incluían tubos de PVC rellenos de hormigón, se pega con las uñas, guantes de boxeo, escombros y vegetales cajas de madera para lanzar ataques. En incidentes separados, sino que también son acusados ​​de tener el graffiti rociado sobre monumentos locales y la propiedad privada, esvásticas elaboración y dibujo consignas nazis.

¿FENÓMENO?

El éxito de los fiscales y activistas en traer a los ocho hombres a juicio y la conexión neonazi ha llevado a algunos medios de comunicación de interés inusual en Mar del Plata, proyectando una sombra sobre la reputación de la ciudad como un complejo de vacaciones en la playa. Sin embargo, Adler rechaza la sugerencia de que la ciudad es única cuando se trata de crímenes de odio de esta naturaleza.

“Estamos viendo una tendencia global hacia la profunda intolerancia de los demás. Estos grupos se oponen formas plurales y democráticas de la vida “, argumentó.

Adler expresó su confianza en que la investigación y el próximo juicio ya se estaban produciendo resultados positivos en cuanto a la seguridad de la comunidad.

“Lo cierto es que esta tendencia en Mar del Plata se ha reducido debido a la labor del sistema de justicia. Esto significa que cuando se produce una respuesta institucional eficiente, se puede detener “, dijo.

Las organizaciones locales de derechos humanos, sin embargo, permanecen en estado de alerta.

“La gente de Mar del Plata no quieren que estas expresiones de xenofobia y discriminación en nuestra ciudad”, Yamilia Zavala Rodríguez, un abogado local de derechos humanos, dijo al  Times, .

“Es impensable que veríamos neonazis en este momento de la historia, pero por desgracia no tenemos”, agregó.

Grupos de derechos humanos han señalado cómo fuertes lazos ciudad a las Fuerzas Armadas y de la dictadura militar de 1976 a 1983 han alentado a las expresiones particulares de odio hacia los sobrevivientes de la dictadura, familiares de los desaparecidos y activistas. grupos neonazis han atacado sitios conmemorativos y públicamente reivindicado figuras controversiales como los caídos soldado de la Guerra de las Malvinas Pedro Giachino, que el grupo de derechos humanos creen que fue un torturador durante la dictadura.

En su mayor parte, sin embargo, los residentes y activistas en la ciudad costera parecen estar movilizando cada vez más contra la perspectiva de su ciudad de inflexión en un santuario para el odio. Muchos estarán observando de cerca el juicio de marzo – y las ocho personas que se sientan en el banquillo.

“La comunidad salió a repudiar este comportamiento que es en parte por eso que hemos sido capaces de avanzar en el enjuiciamiento de la causa contra esta banda”, dijo Javier Moreno Iglesias.

Tales sentimientos estaban en exhibición pública completa de nuevo hace sólo tres semanas, miles de personas salieron a condenar la liberación de los condenados época de la dictadura criminal Miguel Etchecolatz en arresto domiciliario el barrio de Bosques Peralta Ramos.

Etchecolatz, 88, fue el segundo al mando de la policía de la provincia de Buenos Aires durante la dictadura militar. Se pasó al menos 21 centros de tortura y Dentention durante ese período y se ha dado seis cadenas perpetuas por los tribunales por delitos como la tortura, el asesinato y el secuestro de bebés nacidos a las personas detenidas.

En total, 15 personas encontraron culpable de crímenes contra la humanidad de aquella época viven actualmente en Mar del Plata bajo arresto domiciliario.

Alcalde Carlos Fernando Arroyo bajo escrutinio

Activistas y organismos de control están empezando a hacer preguntas sobre el comportamiento pasado de Carlos Fernando Arroyo, el alcalde de General Pueyrredón (un municipio que incluye Mar del Plata).

Los grupos de derechos humanos dicen que han atado Arroyo a la dictadura militar de 1976 a 1983, apuntando a su designación como interventor de un sindicato local de taxistas en 1977. Anteriormente, Arroyo también ha sido acusado de antisemitismo, de forma explícita por la DAIA judía organización en 1994, cuando era un sub-secretario en el mismo municipio. Añadiendo a su accidentada historia, en 2015 Arroyo fue acusado de “observaciones xenófobas y discriminatorias” por parte del organismo contra la discriminación INADI para comentarios que hizo en un programa de televisión local contra miembros de la comunidad boliviana.

“En los dos años que ha estado a cargo de la municipalidad, que no ha hecho ninguna declaración vinculados a la ideología asociada con él,” Ariel Gelblung, jefe del Centro Simon Wiesenthal, dijo a los tiempos . “No podemos y no lo va a perseguir por su fondo, pero sí quiere decir que estamos más alerta.”

activista local Javier Moreno Iglesias dijo que la municipalidad había ignorado el fenómeno de la violencia neonazi en la ciudad, al menos hasta que el público en general comenzó a tomar nota y llamar a la acción.

“El alcalde había dicho que no estaba al tanto de todo esto, a pesar de la evidencia que teníamos. No hemos visto ningún políticas concretas, excepto por parte de la Secretaría de Derechos Humanos, que ha respondido a nuestras solicitudes de reuniones y que desde entonces ha llevado a cabo campañas de concienciación “, dijo Moreno Igliesias en una entrevista.

En abril del año pasado, el Alcalde Arroyo asistió a un evento conmemorativo para el primer soldado caído en la Guerra de las Malvinas, Pedro Giachino, que los grupos de derechos humanos alegan era un torturador durante la dictadura militar de 1976-1983.

Cuestionado por un reportero local (la prensa no fue invitado al evento) acerca de su presencia en el evento, Arroyo dijo: “Estoy rindiendo homenaje a un hombre que dio su vida, que era todo lo que tenía – su futuro, sus sueños – para tratar de recuperar lo que es nuestro “.

Algunos grupos neonazis en Mar del Plata, donde está enterrado Giachino, han elogiado el oficial asesinado, quien está acusado de haber ordenado a escuadrones de la muerte en el norte de Buenos Aires antes de su despliegue en el conflicto de las Malvinas. Alcalde Arroyo también ha sido citado en el pasado como diciendo “estábamos mejor” durante la dictadura.

– JM

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