Inténtalo de nuevo
Había una persona en el zoológico caminando cerca de los elefantes y, de repente, se detuvo para ver algo que le llamó la atención: estas enormes criaturas estaban amarradas con una simple soga. Era evidente que en cualquier momento podían darse a la fuga, pero para su sorpresa, no lo hacían…
Decidió acercarse al domador de estos animales y preguntarle por qué ni siquiera intentaban escaparse, a lo que éste respondió: “Cuando estos elefantes eran apenas unas crías, utilizábamos esa medida de soga para amarrarlos. En esos momentos era suficiente con eso para retenerlos. Intentaron liberarse muchas veces, hasta que llegaron a la conclusión de que no podían contra esa soga. Ahora que ya han crecido podrían soltarse fácilmente, pero tanto se convencieron de que no pueden hacerlo que ya no lo intentan otra vez…”.
“La enseñanza es que podremos tener compromisos difíciles, metas que requieren de mucho esfuerzo; que podremos caer y volver a caer, pues tropezar es algo humano, pero nunca debemos dejar de esforzarnos y volver a intentarlo nuevamente”.
Artículos Relacionados: