El clérigo saudita Adel Al-Kalbani, ex-imam de la Gran Mezquita de Meca, dijo en una entrevista el 22 de marzo, 2019 en el canal de televisión saudita MBC que recientemente cambió de opinión respecto a los musulmanes chiitas y que ya no los considera herejes. También dijo que si el atacante de Christchurch, Nueva Zelanda hubiese sido musulmán, se hubiese librado una guerra feroz en contra de los musulmanes, al igual que muchas guerras en el pasado debido a incidentes en donde los musulmanes no tuvieron nada que ver, dijo. Sin embargo, como el atacante terrorista no era musulmán, la primera ministra de Nueva Zelanda llevó puesto un hijab y el Corán fue recitado en el Parlamento. Al-Kalbani continuó diciendo que todos los principales mayores de terrorismo en todo el mundo, incluyendo ataques contra musulmanes, fueron llevados a cabo por musulmanes. También dijo que los árabes y los musulmanes deberían tomar más iniciativas respecto a las tecnologías y tendencias que provienen de Occidente, tales como las salas de cines y permitir que las mujeres conduzcan, ninguna de las cuales según dijo, llevó a una catástrofe como la que los críticos pronosticaron. Este añadió: «El Islam no estaba destinado a dificultar nuestras vidas».
Para ver el video de Adel Al-Kalbani en el portal MEMRI TV, pulse aquí o debajo.
«Cualquiera que diga que no existe dios sino Alá, que come carne de animales sacrificados por nosotros y que ora en la misma dirección de rezos que nosotros, es musulmán»
Entrevistador: «¿Sigue usted considerando que los estudiosos chiitas son herejes o ha cambiado de opinión?»
Adel Al-Kalbani: «La verdad es que, hasta hace poco, si lo considere…»
Entrevistador: «¿Consideró usted que los estudiosos chiitas eran herejes?»
Adel Al-Kalbani: «Sí.
[…]
«Hablando en general, cualquiera que diga que no existe dios sino Alá, que se come la carne de los animales sacrificados por nosotros y que reza en la misma dirección de oración que nosotros es musulmán. Los casos específicos deben ser remitidos a la judicatura».
Entrevistador: «Este es un tema muy importante, Jeque Adel…»
Adel Al-Kalbani: «Esto es lo que yo pienso hoy. Por Alá, nadie me obligó a decir esto y nadie me habló de ello.
[…]
«Si el asesino [en Nueva Zelanda] hubiese sido musulmán, se hubiese librado una guerra feroz en contra de nosotros, al igual que muchas guerras en el pasado que se han librado contra nosotros debido a incidentes con los que no tenemos nada que ver.
«Ahora recitan la llamada a los rezos [en Nueva Zelanda].
«Además, la primera ministra [de Nueva Zelanda] se colocó un hijab, el Corán fue recitado en el parlamento y gente de todo el mundo expresó su solidaridad con las víctimas».
«Los principales incidentes [terroristas] fueron cometidos por musulmanes»
Entrevistador: «Pero esta es la sociedad de Nueva Zelanda que se une. Ellos están acostumbrados a este tipo de conexión».
Adel Al-Kalbani: «En mi opinión, si [el asesino] hubiese sido musulmán, las cosas serían muy diferentes».
Entrevistador: «¿Por qué dice usted que la violencia y el terrorismo están tan profundamente arraigados en los musulmanes?»
Adel Al-Kalbani: «Esto no es lo que quise decir. Sin embargo, los principales sucesos [terroristas] fueron cometidos por musulmanes. ¿No es así?»
Entrevistador: «Esta es su opinión».
«Ahora tenemos que protegernos de los musulmanes, que entran en la mezquita con sus barbas y túnicas cortas, rezan cerca de nosotros y luego intentan acercarse a Alá asesinándonos»
Adel Al-Kalbani: «Esta es mi opinión y esta es la realidad. Los principales incidentes [de terrorismo]… ¿A quién se le culpa por el 11-S? A los musulmanes. [El 11-S] causó un gran revés en nuestro da’wa [predica, invitación] y en muchos otros campos y fue llevada a cabo por musulmanes. Todos aquellos que murieron en nuestro amado Reino fueron asesinados por musulmanes. Todos los ataques terroristas [en Arabia Saudita] fueron llevados a cabo por musulmanes. Hoy, nuestras mezquitas son vigiladas los viernes, después de los ataques [en las mezquitas] en Al-Qudaih, Dammam y la mezquita en ciudad Kuwait. Ahora tenemos que estar protegidos de los musulmanes, que entran en la mezquita con sus barbas y túnicas cortas, oran cerca de nosotros y luego tratan de acercarse a Alá asesinándonos.
[…]
«Deberíamos tomar la iniciativa con muchas de las cosas que nos llegan [de Occidente]. Por ejemplo, una vez hablé sobre cines y fui atacado por ello. Hoy día los cines se han convertido en una realidad y parte muy natural de nuestras vidas.
«O tomen el tema de las mujeres que conducen… De todas las conversaciones que he escuchado, me imaginé que habrá grandes escándalos sexuales en las calles… Las mujeres comenzaron a conducir [en Arabia Saudita] y no pasó nada, gracias a Alá. Por supuesto que habrá accidentes, como en cualquier otra sociedad.
[…]
«El Islam no tenía como destino hacer dificultosa nuestras vidas».
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