Un nuevo evento lo descarrila, el informe de la construcción de nuevos asentamientos.
Por su parte los palestinos organizan manifestaciones en la franja Occidental y Hamas lanza algunos cohetes desde Gaza.
Todo sucedió así durante la ultima semana pero el momento al que nos referimos originalmente no fue este sino el que sucedió en Diciembre del 2007 durante la visita de Condolezza Rice a Tel Aviv.
En aquel entonces la respuesta no se hizo esperar.
En publico Condolezza declaro que Estados Unidos no apoya los asentamientos,
En privado le informo al entonces Primer Ministro Ehud Barak que no aceptaría este tipo de trampas, y al mismo tiempo le informo a Abbas que tiene dos opciones, o venir a discutir las posibilidades de paz o boicotearlas y con eso permitir que continúen las construcciones.
El truco parece ser es no dejar que las provocaciones de ninguna de las partes tomen el papel central en la obra de teatro.
Condolezza logro llevar a todos a la mesa. Barak acepto la creación de un Estado Palestino, con capital en Jerusalén y el retorno a Palestina de 10,000 refugiados de otros países y entonces Condolezza se enfrento a la otra ‘pequeña’ realidad del Cercano Oriente que es que los Palestinos no saben decir que si.
Abbas no parece ser capaz de decir SI.
También entonces rechazo la propuesta, una propuesta que le daba mucho mas de lo que jamas se le había ofrecido y que hubiera sido aplaudida por la mayoría de los países por su largo alcance y profundidad pero no, Abbas no la acepto pero además, a pesar de lo mucho que se le pidió, se negó a presentar una contraoferta.
Atrás de la confrontación de la semana pasada parece residir tanto la decisión de Netanyahu de no permitir el avance de ningún proceso significativo y la creencia en la administración americana de que la única posibilidad de progreso va a ser el doblegar o desestabilizar a Netanyahu y reemplazarlo por Libni (quien por cierto gano la votación pero perdió la elección) y quizás tengan algo de razón excepto que, para que el proceso avance, alguien va a tener que enseñarle a los Palestinos a decir SI y si pensamos que al hacerlo se convertirían en un país normal es bien obvio que esto no les puede interesar.
Pensémoslo bien, mientras sean refugiados’ reciben billones en ayuda desde todo el mundo.
En cuanto digan que si la ayuda se acaba y empieza el proceso de organizar un país donde, sin la distracción de la guerra, la gente pondría o por lo menos podría poner atención a los negocios del gobierno lo cual haría que los ‘representantes’ del pueblo en vez de poder robarse usar toda la ayuda para su beneficio personal tendrían que usarlo ‘transparentemente’ para beneficio del país.
Cualquiera que ha observado el proceso de corrupción de un gobierno sabe que, mientras mas lodosas las aguas, se puede robar mas con un esfuerzo menor y esto, solo se resuelve dándoles tanto dinero a los corruptos que finalmente se convenzan de la conveniencia de irse a retirar a alguna playa bonita o eliminarlos y buscar nuevos lideres, mas honestos, mas interesados en el bienestar de todos.
¿Aprenderá la nueva administración estas dos simples lecciones de no permitir que los detalles se apropien de la negociación impidiendo la discusión y solución de los verdaderos problemas? ¿Y aprenderán que si no logran conseguir un portavoz Palestino que sepa decir SI todos sus esfuerzos serán inútiles?
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