Sala de Arte. Cinépolis
La verdad hay veces que no entiendo a qué se le puede llamar “Desobediencia”.
Posiblemente, y en este caso. sea una rebeldía a los cánones establecidos. Posiblemente sea eso, es cierto.
Habría que revisar el libro que inspiró esta historia, para saber qué es lo que se quiso decir, y si se dijo bien.
Me inclino a pensar, más bien, que es una lucha, que no se entiende plenamente, por lograr establecer el propio convencimiento.
Desarrollada en un barrio muy pero muy religioso de Londres, esta película surge a partir de la muerte de un rabino muy respetado en su comunidad.
Un rabino cuya hija y la amiga de esta joven (la esposa del inminente sucesor del religioso); guardan una historia antigua, turbia, peculiar y “prohibida”.
Bueno prohibida para los cánones establecidos y para la rigidez de cualquier religión, en este caso la judía.
https://www.youtube.com/watch?v=XfAxL3L8vEg
Destapar una cloaca mal cubierta, es como una especie de erupción descontrolada, que provoca una serie de sensaciones y sentimientos encontrados.
Bueno eso es lo que me parece personalmente, aunque es malo hablar en primera persona; todo en una película confusa, oscura, algo esperanzadora, y en momentos sin sentido.
Con una fuerte tendencia a lo predecible, recuerda las telenovelas de hace algunos años, porque las series de ahora ya son más dinámicas ¡y sorprenden!
Buen sonido e interesante score musical, sin embargo.
No obstante, existe un interesante reto; y es el de saber lo que verdaderamente significa, en este caso, la palabra “Desobediencia”.
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