¿Qué hace Israel en Kenia?

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Tras el terrible atentado terrorista por extremistas Islámicos que han dejado por lo menos 72 muertos y 61 personas desaparecidas en el ataque al centro comercial Westgate en Kenia, países como Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel han prestado ayuda a las fuerzas de seguridad de Kenia. El grupo terrorista tiene nombre y apellido, son milicias islámicas llamadas “Al Shabab” o “Los jóvenes”  nada más y nada menos que las fuerzas de “Al-Qaeda” en Somalia actuando en territorio keniano.

Ya la noticia estaba en la mayoría de los medios cuando un avión militar israelí llego a Nairobi, capital de Kenia, para sumarse a las fuerzas militares de Estados Unidos y Gran Bretaña, para liberar junto con soldados y policías kenianos, a la mayor cantidad posible de rehenes y personas atrapadas en el centro comercial.

Chequemos la Historia. Hay que recordar que el brazo extremista islámico de Al-Qaeda en Somalia, “Al-Shabab”, ya había amenazado al gobierno de Kenia que era blanco perfecto para una serie de atentados terroristas por la ayuda militar que brindó en la pavorosa lucha por el control del cuerno de África, sumado en una guerra civil desde 1991.


El presidente de Israel, Simón Peres, ya había publicado un mensaje donde daba las condolencias y condenaba el ataque para su homólogo, el presidente keniano, Uhuru Kenyatta, el cual decía “Israel está hombro a hombro con el Gobierno y pueblo de Kenia en estos difíciles momentos. Nosotros en Israel conocemos el dolor del terrorismo y haremos todo lo que podamos para apoyar al pueblo de Kenia”. El mensaje era leído cuando ya estaba la unidad élite antiterrorista Israelí, en territorio Keniano.

El grupo terrorista Al-shabab ya había amenazado con atacar directamente a Israel, así como sus intereses en todo el mundo. Lo hizo presente, el centro comercial “Westgate” pertenece a una empresa de origen Israelí, la mayoría de las tiendas pertenecen a Israelíes y judíos estadounidenses, tal como lo aseguró el portavoz del grupo terrorista el Sheikh Abdulaziz Abu Musab.

Recordemos 1976. Tanto Kenia como Israel participaron en la misión de liberación de los pasajeros de un vuelo de Air France secuestrado y desviado al aeropuerto de Entebbe, en Uganda. Más de un centenar de los secuestrados eran judíos e israelíes. Jonatán Netanyahu, hermano del actual primer ministro, perdió la vida en aquella operación. Aquello fue “el punto álgido de la cooperación” entre los dos países, según afirma el experto Yossi Melman.

Israel ya tenía presencia estratégica en África. La primera en 1956 en Ghana, un año después que este país lograra su independencia, gracias a la Internacional Socialista, se produce una relación cordial entre Israel y África, ya Golda Mier buscaba socios comerciales, y lo más importante; aliados estratégicos frente a los países árabes. A Mediados de los setenta había 1,800 expertos israelíes en toda África, más varios miles de militares.

 

Al Shabab, una organización ligada a Al Qaeda, tiene como objetivo crear un estado islámico en Somalia, uno de los países más pobres del mundo. Kenia, que tiene 4.000 soldados en el sur de su vecino del norte en apoyo al Gobierno Federal de Transición, es uno de los objetivos declarados de la organización islamista. El peligro de un régimen extremista islámico en Somalia es inminente, Kenia aliado estratégico de Israel, sería blanco constante de ataques terroristas por fuerzas Somalíes.

Ojalá me equivoque, pero esto me recuerda a la pesadilla que sufrió la comunidad judía Argentina en el ataque a la AMIA, y su relación con Irán. El blanco ya no son solo ciudadanos Israelíes. Ahora el extremismo Islámico va por la comunidad judía en la diáspora y sus aliados bajo la mirada del extremismo islámico. Es tarea de las comunidades judías de estar en total vigilia, detectando posibles blancos para el extremismo islámico. México tiene una pequeña pero creciente comunidad Islámica, mayoritariamente en el sur, blanco perfecto para que cualquier organización extremista Islámica como Al-Qaeda, infiltre ese sentimiento de odio, no solo para Israel sino para los judíos en la diáspora.

Acerca de Luis Gerardo Cervantes-Cohen Luviano

Internacionalista y Politólogo. Máster en Protocolo, Negociación y Relaciones Internacionales. Madrij, Tikkun Olam y Bikur Jolim por la Comunidad Sefaradí en Brooklyn, NYC.

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