En Toulouse y Ankara, en Hungría o en el Oriente
Lisboa o Dakar o Londres, la ola nos lleva adelante…
Más y más fuera de nuestro camino de regreso a nuestros hogares
¿Por qué estamos peleando, por qué estamos añorando?
¿Qué tesoros preciosos hemos perdido?
No es por gloria o por riquezas que vagabundeamos con dolor
Por una mayor y más sagrada causa
No es dominar el mundo nuestro objetivo; sonamos con la libertad
Disfrutar la calma de los viejos, altos árboles y sus copas sombreadas
Las horas pacificas del ocaso en nuestra querida aldea-hogar
Perdidos escuchando el canto suave de las abejas
El relinchar de los caballos pastoreando en la pradera
Cuando la oscura noche se acerca…..
No queremos gobernar otros pueblos, queremos compartir el pan
Con toda justicia con nuestro pueblo en nuestro hogar
Sonamos caminar libremente en nuestros bien conocidos caminos
Mirar felizmente el profundo cielo lleno de estrellas
Y dormir en paz bajo la bóveda azul
Es tan poco y, sin embargo, es todo
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