Aunque hace algunas décadas la costumbre de recibir en casa era mucho más arraigada que en la actualidad, creo que el ofrecer nuestra casa para darle la bienvenida a nuestros amigos, invitados y familiares no tiene por qué pasar de moda.
Si bien en la actualidad los restaurantes son mucho más cómodos y prácticos para juntarse a celebrar, o simplemente a compartir un rato, la calidez que ofrece una casa difícilmente será reemplazada por el mejor servicio de un establecimiento público.
Sin embargo para servir una cena o simplemente unas botanas en casa debes preparar tu refrigerador y alacena con una buena dotación de ingredientes que te permitan salir victoriosa de tu reunión.
Pero creo que un menú hecho en casa, por más sencillo que sea, resulta atractivo para muchos que a veces ya están cansados de la comida de restaurante.
Próximos a celebrar en nuestra comunidad el Yom Haatzmaut, creo que la opción de botanas es muy práctica en estos tiempos. Sólo debes tomar en cuenta algunos aspectos para que tus opciones sean equilibradas y deliciosas.
Siempre busca ofrecer una opción de verduras que pueden ir desde las tradicionales zanahoria, jícama, apio y pepino con un buen yogurt griego que puedes mezclar con un diente de ajo y apio en el procesador y será delicioso para acompañar los vegetales. Si quieres mas variedad puedes añadir espárragos, palmitos, pimientos de piquillo, entre otros.
Evita que predomine un ingrediente en tus botanas, como por ejemplo, que todo tenga pasta de hojaldre o queso crema. Opta por elegir distintas bases para darle variedad así como para que no todas las preparaciones tengan la misma textura.
Si vas a rellenar panecitos, hojaldres o volovanes también cuida que no todos tengan el mismo tipo de ingredientes; puedes variar desde verduras hasta carnes o pescados.
Evita servir demasiadas galletas o patés, busca opciones que resulten satisfactorias para tus invitados, pero que además sean sustanciosas.
De acuerdo a la confianza de tus asistentes puede variar la cantidad de canapés o botanas para servir. Si son de mucha confianza o simplemente tendrás tu reunión en una hora cercana a la comida o la cena, se sentirán tranquilos de servirse mayor cantidad, así que calcula un promedio de 12 por persona.
Sé creativo, busca palitos de brochetas, mini tacitas, cucharitas, shots de tequila o lo que tu imaginación te dicte para servir tus botanas, se vale entrar a internet y ver fotos para darle una mejor presentación a tus platillos.
Cuida tu barra de bebidas para que sea acorde con tus botanas, serán el complemento ideal para tu menú.
Si tienes muchos invitados y no todos estarán sentados cerca de una mesa, busca preparaciones de un bocado que no requieran más que una mano para comerlo, así les harás la vida más fácil a los asistentes.
Mi receta de hoy es un ejemplo que puedes variar con infinidad de ingredientes, usa tortillas de tu preferencia pero pequeñas o partidas a la mitad. También puedes experimentar con las tortillas de jícama como lo decidí hacer yo en este caso y recurrir a ensaladas frescas para rellenarlas.
Espárragos en tortilla de jícama
- 12 tallos de espárragos con las puntas recortadas
- 1 aguacate grande molido
- 12 tortillas de jícama (las venden en supermercados ya rebanadas y limpias)
- 400 gramos de atún en agua de buena calidad
- Sal y pimienta negra al gusto
Preparación:
Blanquear los espárragos en agua hirviendo durante 1 minuto. Escurrir y enfriar en agua con hielo. Escurrir de nuevo y dejar de lado.
Sazona el aguacate con sal y pimienta y embarra la tortilla de jícama con el guacamole. Servir pequeñas porciones de atún a lo largo de la tortilla sin que quede muy lleno.
Acomoda los espárragos y enrolla, luego voltea el taco para que quede acomodado sobre el doblez y no se desarme. Si lo ves muy grande puedes partirlo a la mitad.
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