Este artículo está dedicado a todos los valientes colaboradores de ACNUR, que es La Agencia de la ONU para los Refugiados y principalmente, a esos luchadores incansables del Comité Español, quienes realizan una labor titánica día a día al salir a la calle ya sea con nieve, lluvia o sol, para concientizar a la población española en que deben pensar más allá de sí mismos; logrando entre todos traspasar o derribar las barreras de la indiferencia, debido a que es apremiante empatizar con aquellos ajenos a nuestro entorno y más, si ese entorno y sus gentes se encuentran sufriendo alguna crisis extrema.
Todos lo queramos o no, estamos interconectados con esos que llamamos: “los otros” y que en el caso específico de la población con la que trabaja ACNUR, son los desplazados por cuestiones límite, llámense éstas una guerra, un conflicto armado, persecución por razones políticas, ideológicas, de explotación sexual o a razón de un desastre natural. Porque investigando es ACNUR la agencia que primero llega y la última que se va, ya que cuentan con un equipo que posee la capacidad de responder ante una crisis humanitaria en un lapso máximo de 72 horas, brindando ayuda a más de 600 mil personas.
Es de suma importancia entender y visibilizar las diferentes realidades que acontecen cada día en el Mundo, esas que aunque parezcan lejanas, no lo son tanto y menos, ajenas a ningún entorno histórico-político y social del que provengamos, debido a que no podemos mostrarnos indiferentes frente a ellas y aún más, ante Seres Humanos inocentes quienes se encuentran en riesgo de perder sus vidas, por las ansias de poder o avaricia que compran conciencias alrededor del Planeta.
Cada minuto que pasó mientras escribía este artículo, 31 personas han tenido que salir de sus países de origen huyendo para salvase ellas y sus familias, transformándose muchas veces en ciudadanos de segunda, tercera y hasta cuarta categoría, dentro de un Mundo en donde podemos vivir todos, ya que pertenecemos a la misma raza humana, esa que podría estar ausente de fronteras impuestas por diferencias políticas, económicas y hasta religiosas, convirtiéndose en un lugar mejor logrando vivir en paz y sin discriminación.
En la actualidad más de 68 millones de gentes que son iguales a Usted y a mí, se encuentran en condición de refugiados, eso podría ser comparable con la población de toda Francia, solo que estas personas viven en tiendas de campaña y no en el hermoso país Galo, rodeados algunas veces de solo desierto, donde alrededor del 80% son mujeres y niños, muchos de estos encontrados en condiciones de desnutridos severa, por lo cual ACNUR se ha visto en la emergencia de alimentarlos con (Plumpy Nut) que es una papilla hecha a base de cacahuate y todas las vitaminas y minerales necesarios, para lograr salvarles la vida.
Entonces qué estás esperando mientras lees éste artículo, haz la diferencia y toma conciencia de que no eres único en el Mundo, ya que tus problemas muchas veces ni siquiera se comparan con los de otros Seres Humanos, los cuales han sido menos privilegiados que tú.
Por ello, sal entonces afuera y enfrenta la realidad que nos rodea, esa que no es inmediata para algunos, pero sí que lo es para otros. Y dedícate a transformar al Mundo con tus acciones conscientes y solidarias, hacia quienes también son el reflejo de ti mismo, no solo en esencia sino además en conciencia y transfórmate en consecuencia en una mejor persona y por ende Ser Humano.
Mis respetos al equipo de ACNUR España y mi más sincero reconocimiento a todos esos seres increíbles que cada día, viven en la práctica en medio del conflicto de amar a su prójimo como a sí mismos.
Para Victoria y sus bebés que me hizo ver más allá del infinito…
(Especial para el Diario Judío.com de México.)
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