Si bien no se ha encontrado cura para el Alzheimer algunas empresas han desarrollado artículos como brazalete, pulsera, reloj, estos permiten la comunicación por voz, rastreo y ubicación del portador a través de otro aparato que la persona a cargo debe poseer.
Según la mayoría de las empresas con solo apretar un botón en la pantalla, del receptor aparece el mapa con la posición exacta del portador de este dispositivo, con esto se le puede recuperar.
Estos aparatos también ayudan para personas con Trastorno de Espectro Autista (TEA) para niños y adultos.
Ramzi Abdine, Gerente para Latinoamérica de Cinterion Gemalto, comenta que haya más d 30 millones de personas con autismo y Alzheimer a nivel mundial.
Según Ramzi existen más de 60 millones de cuidadores, buscando soluciones para mejorar la independencia y seguridad de las personas con e estos padecimientos.
La localización llega al teléfono celular o a la computadora del cuidador, permite hacer llamadas de voz bidireccionales en manos libres.
La escucha remota ayuda al cuidador a detectar el momento cuando se necesita ayuda, el usuario tiene acceso a un botón SOS para una emergencia.
Toma Fama, Presidente de la firma ICOIC es padre de una persona con TEA por eso promovió la creación de este tipo, con esto su hijo es más autónomo.
Este ayuda a planificar visitas a museos, centros comerciales o parques temáticos muy incluidos.
Ya se creó un modelo más delgado y potente para la comodidad del portador, sin que no caiga en la tentación de quitársela.
Mi padre padeció Alzheimer, yo no podía cuidarlos por una cuestión de salud porque cuando mi hijo chico tuvo un accidente muy grave, perdí mi memoria de muchos de los recuerdos de mi niñez, de suerte estaba trabajando por lo cual nunca me perdí pero en la mañana amanecía en blanco lo cual me llevó a tener que apuntar todo.
Gracias a mi trabajo y el apoyo de un doctor que me ayudó a recuperar a mi memoria por medio d relajarme, hablar de esos días en el hospital pude empezar a recordar en la mañana, si embargo quedé inhabilitada para cuidar enfermos.
Las pocas veces que lo cuidaba para que mi mamá pudiera hacer algo, me di cuenta del gran trabajo de los cuidadores con todo mi respeto y entrega.
Si bien superé esta etapa, gran parte de mis recuerdos nunca fueron recuperados.
Se dice que la gente vive más años, sin embargo esto trae otros retos como las enfermedades de la tercera edad, como manejarlos para una mejor calidad de vida.
Por esto todos estos avances son bienvenidos por facilitar el trabajo de las personas cuyo rol es cuidar enfermos sobre todo donde su seguridad física como mental está en peligro.
Mi padre decía que cuando no estuviera sano lo dejarán irse, sufrió mucho con una atrofia muscular, mi mamá le sobrevivió cerca de diez años, al final se quedó como una muñequita porque dependía al 100% de quienes la cuidaban, excepto su memoria que hasta el final impresionaba por su lucidez.
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