Sea por el sector de las computadoras, de internet, de las redes sociales o del juego online, la tecnología está omnipresente en nuestra sociedad. Resulta curioso comprobar que gran parte de los responsables de esta revolución tecnológica son o vienen de familias judías. Son nombres que han cambiado nuestras vidas con su aportación al mundo de la tecnología y con su empeño en transformar una idea que parecía increíble en una realidad que es irrenunciable.
Israel se ha convertido en los últimos años en un importante centro de creación de ideas y, pese a que hay muchas diferencias entre el Sillicon Valley americano y el Sillicon Wadi israelita, la concentración de empresas de alta tecnología sigue creciendo y hace de Tel Aviv un referente mundial donde están presentes las principales empresas del sector tecnológico. Muchas de esas compañías, aunque no se hayan creado en Israel, tienen también un importante matiz judío en su origen.
En una entrevista para Technion, el Instituto de Tecnología de Israel, Yossi Vardi comentaba que la creación de empresas está en el propio ADN del país: Israel es en cierto modo una start up en sí mismo. Vardi, que pasó 15 años en ese instituto, está considerado como el gurú de internet en Israel. Se le considera el “padre” de más de 60 compañías de alta tecnología en diversos campos, entre los que se incluyen las telecomunicaciones.
La tecnología ha provocado la creación de nuevos negocios pero también ha transformado el mundo tal y como lo conocíamos. En el sector del ocio, uno de los más afectados por estos avances, otro importante emprendedor nacido en Israel ha sido una pieza clave dentro de una industria que no se puede separar del avance tecnológico: el juego online.
Isai Scheinberg, nacido y criado en Israel pero asentado desde hace años en Canadá, trabajó para IBM hasta que se convirtió en el fundador de la sala de poker online Poker Stars allá por el año 2001. Esta plataforma revolucionó la manera en que se jugaba este tradicional juego de casino, y ha ido creciendo en la última década de una manera espectacular. Alrededor de 80 millones de usuarios están activos en Poker Stars en todo el mundo, casi nada.
Si bien el poker es una opción de entretenimiento, la comunicación es una cualidad intrínseca de nuestra sociedad. De ahí que los usuarios de la plataforma Facebook superen con mucho a los que usan Poker Stars.
El fundador de la reina de todas las redes sociales es el popular Mark Zuckerberg, cuya hermana, Randi Jayne, también ha formado parte de la empresa. Pese a que Mark se define como ateo, ambos fueron criados en una familia judía practicante.
El mismo origen que Zuckerberg tiene la Directora de Operaciones de Facebook: Sheryl Sandberg. Su familia es judía de origen soviético. Antes de trabajar en Facebook, esta ejecutiva, que ha estado entre las 100 personas más poderosas del planeta según la revista Time, fue jefa de ventas de Google.
El mayor buscador de internet surgió de la mente de dos estudiantes de Standford University, ambos judíos: Larry Page y Sergey Brin, nacido en la antigua URSS pero emigrado a Estados Unidos cuando tenía 6 años.
La lista de nombres judíos determinantes en la creación e implantación de esta era de la tecnología en la que vivimos podría continuar pero, por tiempo y espacio, nos vamos a detener con uno de los pioneros del sector que, sin embargo, ha tardado en ser reconocido.
Todo el mundo conoce a Steven Spielberg pero pocos saben de Arnold M. Spielberg y su relación con Apple, Microsoft o IBM. El padre del afamado director de cine es hijo de dos emigrantes ucranianos que se conocieron en Cincinnati. Desde muy temprana edad mostró una gran habilidad con la tecnología y acabó convirtiéndose en un gran ingeniero electrónico.
Aprovechando el aniversario de los 51 años de la creación del lenguaje de programación BASIC, a lo que Spielberg contribuyó, la compañía General Electric, para la que trabajó durante años, reivindica estos días la importante labor del menos conocido de los Spielberg.
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