Los cuerpos de las cuatro víctimas judías de la matanza de Toulouse llegaron la mañana del miércoles a Israel, donde serán enterradas en un cementerio de Jerusalén, indicaron fuentes aeroportuarias.
El avión de la compañía israelí El Al, en el que viajaban también medio centenar de allegados de las víctimas y el ministro francés de Exteriores, aterrizó poco después de las 5:45 en el aeropuerto internacional Ben Gurión.
Cuatro ambulancias y tres autobuses salieron del aeropuerto en dirección a Jerusalén.
Los cuerpos de los tres menores y del rabino asesinados a sangre fría el lunes en Toulouse serán inhumados a partir de las 10:00 hs en el cementerio Har Hamenujot (Monte de reposo) de Jerusalén, en el barrio de Givat Shaul, a la entrada de la ciudad.
Los cuatro féretros fueron trasladados el martes de Toulouse al aeropuerto parisino de Roissy en un avión fletado por el ministerio francés de Defensa.
En el Pabellón de recepción del aeropuerto tuvo lugar una ceremonia fúnebre en presencia del presidente Nicolas Sarkozy y del primer ministro François Fillon.
Jonathan Sandler, de 30 años, profesor de religión, sus dos hijos Arie, de 5 años, y Gabriel, de 4, así como Miriam Monsonego, de 7 años, hija del director de la escuela, fueron asesinados el lunes delante de la escuela judía Ozar Hatorah de Toulouse.
Sandler, de nacionalidad francesa, vivió varios años en Israel y los tres niños tenían la doble nacionalidad franco-israelí, según la Embajada de Israel en Francia.
Las autoridades israelíes expresaron el martes su satisfacción por los esfuerzos de Francia para dar con el autor del tiroteo, pero los comentaristas israelíes señalaban con inquietud un clima antisemita en Europa.«Muchos pensaban que después del Holocausto y la ocupación nazi, los niños franceses ya no serían asesinados nunca más a sangre fría por causa de su religión. Y sin embargo, es precisamente eso lo que sucedió en Toulouse», publicó el diario Haaretz.
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