En el último año, más de 30.000 personas de seis continentes hicieron aliá a través de la Agencia Judía para Israel.
Hace apenas unas semanas, 82 etíopes aterrizaron en el Aeropuerto Ben Gurión para comenzar sus nuevas vidas como israelíes, luego de una decisión del Gobierno de Israel de permitir que mil etíopes hicieran aliá en 2019. Cuando el vuelo aterrizó, el personal del aeropuerto los llevó a la zona de arrivos, donde fueron recibidos por una multitud de cantantes y bailarines de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que agitaban banderas israelíes y cientos de familiares de los nuevos inmigrantes.
Cada uno de ellos recibió asesoramiento pre-aliá y un pasaje gratis a Tel Aviv. Ahora que llegaron, recibieron vivienda temporal, lecciones de cultura hebrea y judía, y orientación sobre empleo y educación.
Nicolás, de 27 años, quien hizo aliá desde Uruguay, se enamoró de Israel cuando se graduó de la escuela secundaria y fue a Jerusalem para capacitarse como consejero del movimiento juvenil. Después de regresar a Montevideo para trabajar en el negocio familiar, todavía sentía que Israel era su hogar. Nicolás recientemente terminó un curso de hebreo de la Agencia Judía de cinco meses y planea inscribirse en las FDI en unas pocas semanas.
La Agencia Judía está ahí para cada inmigrante. Ofrece programas que facilitan el proceso de integración para los nuevos israelíes, viviendas para familias y ancianos y cientos de miles de horas de instrucción en hebreo.
Aliá es sólo una parte de la historia del pueblo judío. Pésaj nos recuerda el éxodo de Egipto, que transformó doce tribus que escaparon de la persecución en una nación con su propia historia, idioma e identidad.
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