Alto el fuego entre Israel y Hamas tras la peor escalada de violencia en cinco años

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La escalada más amplia y grave desde la guerra del 2014 ha finalizado este lunes a primera hora de la mañana de igual forma que las diez miniescaladas del último año: con la proclamación de alto el fuego por parte de las facciones armadas palestinas y el silencio oficial de Israel que sin embargo ha anunciado algunas medidas que confirman la tregua alcanzada con la mediación egipcia. Como por ejemplo la vuelta al colegio y el levantamiento de restricciones en carreteras en las numerosas localidades israelíes que desde el sábado por la mañana han sido el blanco de 700 proyectiles disparados desde la vecina Franja de Gaza.

“Se ha logrado un acuerdo de alto el fuego que entra en vigor a las 4.30 de la mañana”, anunció la cadena de televisión del grupo islamista Hamas tras otra noche de ataques mutuos en una espiral con disparos, misiles, bombas y proyectiles que desde este viernes ha dejado un balance mortal de 25 palestinos y cuatro israelíes.

La vuelta a la frágil calma llega tras la reunión celebrada ayer por la tarde en El Cairo entre oficiales de la Inteligencia egipcia y líderes de Hamas y Yihad Islámica y la mantenida en Jerusalén del gabinete de seguridad encabezado por el primer ministro y titular de Defensa, Benjamin Netanyahu. Más allá del cese de los ataques mutuos, el alto el fuego pasa por los acuerdos llegados el mes pasado hacia una tregua a largo plazo bajo la mediación de Egipto y el enviado especial de la ONU Nickolay Mladenov sobre las medidas que alivien la dramática situación económica (50% de desempleo) en el aislado enclave controlado por Hamas desde el 2007. Por ejemplo, la garantía que esta semana ingrese en Gaza una nueva partida de la ayuda económica de Catar (30 millones de dólares mensuales), la vuelta a los 15 millas naúticas para la pesca en las costas del enclave costero, y proyectos humanitarios patrocinados por la ONU respecto a electricidad y agua.


Si se mantiene la tregua aunque sea sólo en el mes de mayo- más allá de este plazo sería exhibir un gran ejercicio de optimismo- sería una buena noticia en Gaza de cara a la festividad del Ramadán y en Israel que esta semana celebra los festejos de la Independencia y la siguiente el festival de Eurovisión en Tel Aviv. La celebración de la final del mediático e internacional evento el próximo 18 de mayo hubiera estado en seria duda si el duro enfrentamiento de este fin de semana se hubiese convertido en guerra con proyectiles disparados contra la céntrica ciudad.

El acuerdo-indirecto, no escrito ni reconocido- de tregua se mantiene desde primera hora de la mañana pese a su enorme fragilidad y la creencia basada en la experiencia de que en cualquier momento puede romperse.

Con las advertencias de Yihad y Hamas de reanudar el lanzamiento de proyectiles y globos incendiarios contra el sur de Israel ante lo que denunciaban “de falta del cumplimiento del Gobierno israelí del calendario pactado para poner fin al sufrimiento e ilegal bloqueo de Gaza” como fondo, la escalada se inició el viernes por la tarde cuando un francotirador de Yihad hirió a dos soldados israelíes en la frontera entre Israel y Gaza. El ataque de respuesta militar alcanzó una base de Hamas matando a dos milicianos. El sábado por la mañana, Hamas y Yihad respondieron con el mayor ataque de proyectiles desde el 2014 lo que provocó asimismo una masiva represalia militar en Gaza desatando una cadena que Egipto ha logrado frenar evitando, de momento, un conflicto bélico similar al del verano del 2014.

Por primera vez desde entonces, los proyectiles desde Gaza han provocado la muerte de israelíes. Tres civiles murieron por el impacto de cohetes en Ashdod y Ahskelón mientras que otro no sobrevivió al misil antitanque Kornet disparado por Hamas contra su coche. Según fuentes militares consultadas por este diario a media tarde, “alrededor de 400 proyectiles cayeron en campo abierto. El 86% restante fue interceptado por la Cúpula de Hierro”.

El ejército israelí, por su parte atacó 350 objetivos de Hamas y Yihad con sucesivas redadas contra comandos, lanzaderas de proyectiles, instalaciones, casas, edificios de varias plantas e instalaciones que vincula a las milicias. Gran parte de los 23 muertos pertenecen al brazo armado de Hamas y Yihad aunque también hay civiles como un adolescente, dos mujeres embarazadas y un bebé. En este sentido, mientras Hamas afirma que una de las mujeres y un bebé (el ministerio de Sanidad de Gaza corrigió ayer su primera información al señalar que no era su madre sino tía) murieron en un ataque aéreo israelí cerca de su casa, el ejército asegura que el motivo fue el fallido lanzamiento de un proyectil de las milicias en Gaza.

Por primera vez desde el 2014, Israel empleó el llamado “asesinato selectivo”. Tras el seguimiento de Inteligencia israelí, el coche de Ahmed Judari fue alcanzado por un misil en las calles de Gaza. “Era un terrorista responsable de la transferencia de fondos económicos de Irán al brazo armado de Hamas y Yihad”, indicó el ejército incidiendo en el mensaje de algunos expertos locales de que “Irán sigue presionando a los grupos terroristas en especial Yihad para no aceptar la tregua y atacar a Israel”.

NETANYAHU: “LA CAMPAÑA NO HA ACABADO”

En la derecha y en el partido centrista “Azul y Blanco”, se escuchan hoy duras críticas hacia Netanyahu por aceptar el alto el fuego. “Otra escalada que acaba con Israel cediendo al terror y chantaje de los terroristas. Netanyahu no tiene la valentía ni siquiera de anunciar a los israelíes qué se ha pactado”, denuncia el diputado Yair Lapid que añade: “Lo que hay que hacer primero es restaurar la disuasión ante un grupo que provoca el terror a un millón de habitantes israelíes y después promover soluciones económicas y humanitarias para Gaza con apoyo regional”.

Netanyahu y el liderazgo de Hamas coinciden en la creencia que, aunque la escalada ha acabado, seguramente no será la última. Ante las críticas, Netanyahu afirmó: “En los últimos dos días hemos golpeado con mucha fuerza a Hamas y Yihad atacando más de 350 objetivos y golpeando a terroristas. La campaña no ha acabado y requiere paciencia y criterio. Nos preparamos para lo que venga. El objetivo era y es garantizar la calma y seguridad de los habitantes del sur de Israel”,

El portavoz de Hamas, Sami Abu Zuhri define las palabras de Netanyahu como “ridículas”. “La resistencia logró disuadir al ejército de Israel. La escalada ha terminado pero el enfrentamiento no acabará hasta la devolución de los derechos de nuestro pueblo”, dijo. Las facciones palestinas avisan que respetarán la tregua “siempre y cuando Israel respete lo acordado”.

En Gaza, mientras tanto, inician la festividad musulmana del Ramadán avisando que un nuevo enfrenamiento es inevitable si no hay una sustancial mejora en el paupérrimo y aislado enclave con la apertura total y permanente de los pasos fronterizos israelíes y egipcios. Hamas espera poder “contener” a Yihad Islámica y mostrar “logros” a los dos millones de habitantes de Gaza sin olvidar que hace unas semanas sus efectivos reprimieron protestas internas contra su régimen. Según Hamas, el conato de revuelta interna estuvo promovido desde la distancia por su gran rival palestino Fatah que lidera el presidente de la Autoridad Nacional Palestina Abu Mazen).

La reconciliación interna palestina es otro de los objetivos de la mediación egipcia en los últimos años. Tras numerosas reuniones con líderes de los dos principales grupos palestinos, El Cairo ve cómo poner fin a la escisión entre Gaza-Hamas y Cisjordania-Fatah es más difícil incluso que lograr un alto el fuego entre Israel y las milicias de Gaza.

1 comentario en «Alto el fuego entre Israel y Hamas tras la peor escalada de violencia en cinco años»
  1. Israel debe demostrarle a los terroristas palestinos, y al mundo, que dichos ataques terroristas e indiscriminados nunca van a quedar impunes de ninguna manera y que quienes inician este tipo de agresiones comprendan de una buena vez que si se arriesgan a sembrar vientos, que se atengan a tener que cosechar tempestades. Israel no debe someterse a un alto al fuego, si no que debe continuar hasta acabar con las fuentes del terror que tienen los terroristas. Lo ÚNICO CLARO que queda de esta experiencia, es que Judea y Samaria jamás deben quedar bajo control palestino y que por las mismas razones de seguridad nacional que justificaron la soberanía total israelí sobre los altos de Golán, son exactamente las mismas que justifican la anexión de Judea y Samaria. La entrega de palestina al control de Hamás y de la Yihad, han dado todos los argumentos que necesitábamos en ese sentido.

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