Corona multiplica en estos días no sólo el número de afectados y muertos en los principales países del Medio Oriente, con excepción de la estrecha franja de Gaza. A pesar de que la densidad demográfica es aquí la segunda más alta del mundo, su aislamiento relativo sustancialmente le favorece. No es el caso de Israel, Egipto, El Líbano y Siria donde con porcentajes desiguales de afectados y muertos el covid-19 revela un filo particular sin llegar de momento a los índices que se conocen en Estados Unidos y en algunos países de Europa y América Latina.
Su afiebrada presencia afecta en particular a los círculos que en estos días elevan oraciones al Ser que modela sus vidas sin perdonar la muerte. Por ejemplo, en los barrios religiosos judíos localizado en Jerusalén, Benei Brak y otras localidades el virus agrede en particular y obliga al gobierno a suspender tanto las visitas a las tumbas de los soldados caídos en los repetidos duelos militares como los festejos – otrora bulliciosos y masivos – por los 72 años de independencia nacional.
También la amplia minoría árabe – un quinto de la población israelí – ha renunciado a las prácticas del Ramadán. Para asegurar esta conducta la policía debe desempeñar una ingrata tarea considerando que nunca ha gozado de simpatía alguna entre ellos. No es improbable que actos de violencia se multiplicarán en el curso de los próximos días.
Un escenario que se repite desde Beirut a El Cairo sumando expresiones de airada protesta debido a la parálisis de los mercados y la amarga indiferencia de las autoridades. Covid-19 acentúa y pone plenamente en descubierto las crónicas debilidades de los servicios de salud en estos países y erige las bases para una protesta masiva que al cabo llegará. Pero de momento, las oraciones a Allah deberán esperar.
En estas circunstancias tal vez está ocurriendo lo que algunos rabinos sugirieron para explicar el Holocausto: deprimido por la criminal insensatez humana, Dios habría resuelto en aquel momento esconderse y callar.
Si corona continuará multiplicando víctimas en los inquietos espacios del Medio Oriente no pocos Le preguntarán: ¿ Hasta cuándo ?
Artículos Relacionados: