Sin duda, Jerusalén es mi ciudad favorita en todo el planeta. No hay lugar de la tierra más cargado de energía espiritual que este.
Hoy celebramos el 53 Aniversario del Día de Jerusalén, un día de fiesta nacional en Israel, conmemorando la reunificación de la ciudad y el establecimiento de control israelí en la Ciudad Vieja, como resultado de la Guerra de los Seis Días, en Junio de 1967. Este fue el primer día en que los judíos controlaron toda la ciudad de Jerusalén desde la destrucción del Segundo Templo a manos de los romanos en el año 70 de la era común.
El pueblo judío es el único que recuerda a una ciudad en el día más feliz de su vida: en la boda. Las ceremonias de boda judías terminan con el novio recitando el Salmo 137:5-9:
» Si me olvidare de ti, oh Jerusalen,
Pierda mi diestra su destreza.
Mi lengua se pegue a mi paladar,
Si de ti no me acordare;
Si no te enalteciere a Jerusalén
Como preferente asunto de mi alegría.»
y al finalizar el verso, el esposo pisa una copa, ¡recordando la destrucción del templo! y procede a besar a su esposa.
La tradición judía enseña que el Monte del templo es el punto focal de la Creación. Y es que este es el lugar físico donde Di-s prometió habitar.
En la entrada al Muro Occidental del Templo, conocido como el Muro de los Lamentos, lee la siguiente inscripción:
«Aquí fue creado Adan.
Aquí Abraham, Isaac y Jacob sirvieron a Dios.
El primero y segundo Templos fueron construidos en este monte.
El Arca del Pacto fue puesta sobre la roca de fundación misma.
Jerusalén fue elegida por Dios como la morada de la Shejiná (la gloria de la presencia divina).
David anhelaba construir el Templo, y Salomón su hijo construyó el Primer Templo aquí hace unos 3000 años. Fue destruido por Nabucodonosor de Babilonia.
El Segundo Templo fue reconstruido sobre sus ruinas setenta años después. Fue arrasado por las legiones romanas hace más de 1900 años.
El actual Muro de los Lamentos frente a ti es un renacimiento de los muros de contención del Monte del Templo Occidental. Los judíos han rezado a su sombra durante cientos de años, una expresión de su fe en la reconstrucción del Templo.
Los sabios dijeron al respecto:
«La Presencia Divina nunca se mueve del Muro Occidental».
«Mi casa es casa de oración … para todos los pueblos » Isaías 56: 7
Así que en honor al 53 aniversario de la Reunificación de la Ciudad Santa, celebrando el espíritu eterno de Jerusalén, el Museo de la Ciudad de David presenta una nueva exhibición virtual yuxtaponiendo imágenes en blanco y negro de finales del siglo XIX y principios del XX con fotos a todo color de los tiempos modernos.
El fotógrafo Koby Harati, utilizando los archivos fotográficos de la Colección de la Biblioteca del Congreso, creó las imágenes espectaculares de esta colección con algunos de los sitios más destacados de la Biblia, incluyendo el monumento Yad Avshalom, El Monte de los Olivos y la Tumba de Zacarías, El Muro Sur de la Ciudad Vieja y el Monte del Templo.
Koby pasó muchas noches deambulando por los archivos de la Biblioteca del Congreso, tratando de identificar los lugares cambiados y encontrar el lugar exacto desde el que se tomó la foto y la hora del día aproximadamente.
Una vez que seleccionó las fotos de la Colección Eri & Edith Matson, inició la filmación agotadora ya que recorrió grandes distancias a pie, intentando volver antes del medió día, con el aislamiento del Coronavirus interrumpiendo ligeramente la libertad de movimiento y sus planes.
«Finalmente, la edición, la combinación y la elección de dónde cortar, lo que el formato permite… o no. Y aquí está el Día de Jerusalén»
dice orgullosamente Harati.
Mi imagen favorita de la colección es del Valle Kidron y el pueblo de Siloam ya que me recuerda vivir en el presente. El Valle de Kidrón actuó como la frontera natural de la antigua Jerusalén durante miles de años y separó la ciudad de los vivos (la Ciudad de David y la Ciudad Vieja) y el Monte de los Olivos, que sirvió como la necrópolis de Jerusalén desde los tiempos bíblicos en adelante. El pueblo de Siloam se encuentra a lo largo de la ladera sur del Monte de los Olivos, en una ampla zona llena de antiguas cuevas funerarias.
Ya que por ahora, solo los israelíes podemos visitar la ciudad, pues a causa de la pandemia las fronteras aún están cerradas a extranjeros, celebremos juntos y en la distancia la Ciudad de Oro, a través de esta exhibición virtual, que combina más de un siglo de fotografías.
Disfruta la colección completa con explicaciones detalladas de cada imagen en el Sitio de La Ciudad de David- «La Ciudad de Oro en Blanco y Negro»
¡Mazal tov, Jerusalén de mis amores!
QUÉ TRABAJO MARAVILLOSO!!!ME ENCANTÓ.FELICITACIONES AL FOTÓGRAFO.DOY GRACIAS A DIOS EL HABER ESTADO EN JERUSALEM,EN ISRAEL Y CON MIS HIJOS.NUNCA OLVIDARÉ ESE VENDABAL DE EMOCIONES.AM ISRAEL JAI !!!!