El informe del Canal 11 de la televisión estatal israelí, llamado también “Kan”, indica que en el encuentro, que tuvo lugar hace dos semanas, Abbas rechazó la sugerencia de Argaman.
En enero pasado, Abbas ordenó que se llevaran a cabo las elecciones nacionales palestinas. En los últimos comicios, que tuvieron lugar en 2006, Hamás se alzó con la mayoría del Parlamento.
La victoria parlamentaria de Hamás condujo a una sangrienta lucha por el poder que resultó en 2007 con establecimiento de dos entidades rivales palestinas separadas: Hamás controla Gaza y Fatah, la columna vertebral de la Autoridad Palestina, domina en Cisjordania. Algunos comentaristas se refieren sarcásticamente a la primera como “Hamastán” y “Fatahland” a la segunda.
El decreto de Abbas ordena que las elecciones legislativas se lleven a cabo el 22 de mayo y los comicios presidenciales el 31 de julio. Sin embargo, pocos analistas están convencidos de que las elecciones palestinas se llevarán a cabo. Varias veces, las promesas de elecciones se han quebrantado en los últimos catorce años, desde la última vez que los palestinos votaron.
El martes, los líderes de las facciones palestinas reunidos en El Cairo firmaron una “carta de honor” para garantizar que los comicios sean celebrados con “transparencia e integridad”. Las facciones, incluyendo Fatah y Hamas, prometieron no incitar “sentimientos religiosos, sectarios, tribales, regionales, familiares y raciales” y abstenerse de la intimidación violenta.
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