Desde el asesinato del comandante de la División Norte la Yihad Islámica, Baha Abu al-Atta, dispararon desde esa organización más de 190 cohetes hacia territorio israelí, el 90% fueron interceptados y cayeron en lugares abiertos. No obstante, desde el grupo palestino aseguraron que «la verdadera respuesta aun no llegó». Desde Israel monitorean la situación preparándose para una eventual escalada, y en la jornada de hoy se pudo observar movimiento de tropas y tanques.
Según los informes de los medios de comunicación de Gaza, diferentes organizaciones que operan en la Franja de Gaza, entre ellas Hamás y la Yihad Islámica, se reunieron durante las horas en la sala de operaciones conjuntas que tienen.
La declaración emitida post reunión es contundente: «La respuesta por el asesinato de Abu al-Atta aun no llegó, y llegará pronto».
Hasta el momento el palestino Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) no se involucró en los enfrentamientos, pero el dirigente de la organización Fawzi Barhoum aclaró: «No detendremos acciones de venganza contra Israel».
Medios palestinos informaron que además Abu al-Atta y su esposa, cinco palestinos murieron como consecuencia de los ataques israelíes. Todos ellos de la Yihad Islámica.
En tanto, los residentes de Gaza se mantuvieron en sus hogares, no hubo clases, las oficinas gubernamentales permanecieron cerradas y las bases militares fueron evacuadas.
El Ejército de Israel está preparado para una posible escalada de violencia junto a la Fuerza Aérea de Israel. Reservistas fueron llamados para operar el sistema Cúpula de Hierro y para el Comando de Retaguardia (Defensa Civil). El flamante ministro de Defensa Neftali Bennet declaró «situación especial» las próximas 48 horas en las localidades dentro los 80 kilómetros de la frontera de Gaza.
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