Soñé que iba al cielo y un ángel me daba un recorrido allá arriba.
Llegamos a un cuarto de trabajo donde había cientos de ángeles muy ocupados. “Esta es el área de Recibimiento, acá se reciben todas las peticiones que se le hacen a Hashem en los rezos.
“Miré esta sección y estaba abarrotada de ángeles clasificando y recibiendo peticiones de las personas de la Tierra.
Caminamos un poco más por un largo corredor hasta que llegamos a la segunda sección. “Esta es el área de paquetería y envío, desde acá se mandan a la Tierra todas las peticiones que pide la gente.
“De nuevo me percaté de todos los ángeles que se movían precipitadamente por el cuarto, ocupados enviando a cada quien lo que había solicitado.
Finalmente al final del corredor nos encontramos con un cuarto en el que había un solo ángel sin hacer absolutamente nada.”¿Qué sección es esta? “Me respondió el ángel casi con vergüenza: “Esta es la sección de agradecimientos, después de que las personas reciben sus peticiones muy pocas agradecen por ello”.
“Cómo puedo agradecer a Hashem? Pregunté” Simplemente di “gracias Hashem”.
“¿Sobre qué cosas debo agradecer?”
“Simple, si tienes comida en tu refrigerador, ropa para vestirte y un techo bajo el cual dormir, entonces eres más rico que el 75% de la población mundial.
Si tienes dinero en el banco o en tu cartera, o un poco de cambio en una alcancía, eres considerado dentro del 8% de los ricos del mundo.
Si pudiste leer este mensaje, formas parte del 1% de la gente que tiene esta oportunidad.
Si despertaste esta mañana con más salud que enfermedad, eres más bendito que aquellos que no sobrevivirán el día.
Si nunca has experimentado el temor de la batalla, la agonía de la tortura, hambre o la soledad de la prisión estas delante de 700 millones de personas en el mundo.
Si puedes asistir a un Bet Hakneset sin el temor de amenazas, arresto, tortura o muerte, eres envidiado, y más bendito, que más de tres billones de personas en el mundo.
Si tus padres siguen con vida, y aún casados, eres muy raro.
Si puedes mantener tu cabeza en alto y sonreír, no eres la regla, eres único para todos aquellos consumidos por la desesperación. “
“Bien, y ¿ahora qué? ¿Cómo puedo empezar?”
“Si estas leyendo este mensaje, acabas de recibir una doble bendición, que alguien te considera muy especial y que no formas parte de los dos billones de personas en el mundo que no pueden leer.”
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