Se veía venir. Lo dije anteriormente en este espacio: La Asamblea General de la O.N.U., conforme a ese enorme bloque de países antisionistas, rayanos en el antisemitismo, votará a favor de pasar a los palestinos, de ser un observador, a miembro legítimo y declarado de los países miembros.
Luego el asunto pasará al Consejo de Seguridad. Ahí habrá obstáculos prácticamente insalvables, particularmente el derecho de veto de los EUA.
En la primera instancia, una docena de países – y ojalá más – se opondrán, pero recordemos que hay ciento noventa y dos ahí representados, muchos de ellos formando bloques que, por conveniencia financiera o política, deberán adherirse a la proposición original.
En la segunda, Rusia y China, por razones conocidas, están a favor, pero recordemos que con una de las siete naciones del Consejo que vete, el asunto no prosperará.
Veremos si cambia de actitud el gobierno de Obama. Ojalá que no. Bueno, eso es por fuera, o sea, factores decisivos, pero externos. Veamos las cosas por dentro:
Existe un aparente líder político en el movimiento palestino, Salam Fayad, a quien los gobiernos de algunos países desarrollados consideran moderado y bien preparado. Fayad incluso declaró que se le dieran dos años para mostrar su capacidad de gobernanza y efectividad cuando se declarara la existencia y aceptación de un estado palestino. Actualmente funciona como Primer Ministro palestino, aunque no estoy seguro de cuál parte, pues sabemos que Yehuda y Shomron es de Mahmoud Abbas (terrorista partícipe en la masacre de niños en Ma’alot ) y su Organización de Liberación Palestina, heredera de Yassir Arafat (Fatah) ; y Gaza es de la temible terrorista Hamas, lanzadora de toda clase de proyectiles y matanzas de familias inermes en Israel.
Este es el escenario primario de la probable declaración de la O.N.U.
Ahora adentrémonos en las derivaciones y los siguientes actos.
El llamado pueblo palestino es y ha sido el principal receptor de miles de millones de dólares por parte de algunas naciones europeas, así como de ayudas por parte de la O.N.U., la U.N.R.W.A – United Nation’s Refugees Welfare Agency – y varias otras organizaciones mundiales. De estas ayudas, está comprobado, sólo una parte menor ha llegado a la población en general. El grueso ha servido para enriquecer a sus representantes y dirigentes.
Pero no olvidemos que también los palestinos han servido como carnada e incluso, aparador de varios países petroleros árabes. Irán los ha utilizado como bandera para distraer a su pueblo con su política del Gran Satán y el Pequeño Satán. Siria, para justificar su derrota total de 1967. Arabia Saudita, para mantener su guerra intestina contra los shiitas. Jordania, a pesar de la firma del Rey Hussein con Israel, para sostener su política de insistencia con respecto al occidente del río Jordán, y justificar su reinado de orgullo como lo hace su heredero, frente a un pueblo subdesarrollado y falto de perspectivas. Egipto, con Gaza y el Sinaí como cabeza de playa en sus ataques a Israel, su contrabando de armas, etc.. En estos dos últimos, ya juega un papel importante la Hermandad Musulmana, que está agazapada detrás de lo que la prensa occidental, tan simpática ella así como políticamente correcta llamó la ” primavera árabe”.
Esta es la primera derivación. Vayamos a la segunda:
Uno de los argumentos palestinos es que Israel no les ha permitido desarrollarse económicamente, que su tasa de desempleo es del 25%.
Esta falacia tiene la naturaleza del carro de sonido de nuestro vendedor de pomadas de los mercados mexicanos. Sirve para todo mal o enfermedad, sea cual sea. Lo peor del caso es que la compran y poco tiempo después se dan cuenta que era un cuento, sólo un argumento de venta.
Quienes conocemos lo que ellos llaman “West Bank” y Gaza, y visitamos Schem, Ramallah, incluso Tul-karem y el casino de Jericó o Gaza City y las costas del Mediterráneo (con nuestro pasaporte mexicano, por supuesto) una y otra vez, nos damos cuenta de que aquellos campos de refugiados ( ¿? ) ya no existen. Lo que vemos son, por ejemplo, Gaza City llena de bulevares, hoteles, restaurantes, automóviles, gente ocupada, oficinas, etc. En la costa, lo que allá se llaman villas, muchas de ellas mejores que las de nuestros potentados mexicanos en Playa del Carmen o, cuando menos, Acapulco. Los productos agrícolas se venden y exportan; la manufactura industrial está en pañales – como siempre ha sido en el mundo árabe -, pero TV’s, equipos de “sensaround”, así como “home-theaters”, buena ropa y calzado de marca, etc., hay mucho, aunque caro (igual que en Israel).
Entonces nos preguntamos: ¿Cuál será la verdadera situación de lo que se llama pueblo palestino? Si no son un “montón de atrasados, sojuzgados por el yugo de la ‘dominación’ israelí”, si lo que Salomón dice es cierto, ¿por qué acuden a la versión de la minusvalidacion política y social?
La respuesta es clara: porque se dejan manejar. Ideológicamente están dominados por sus fanáticos religiosos. Desde siempre, se les ha imbuido que el judío es su enemigo, tanto más cuanto que este ocupa un trozo de tierra que debía ser de “ellos”. Lo que dice el Imam es lo que debe ser. Por fin llegò la hora de ser parte del mundo àrabe. Quieren ser alguien. Mas su estructura social continuarà siendo como desde hace ochocientos años: varios pastores y sus muchos borregos. Los primeros, con sus inveteradas leyes religiosas y políticas, impondrán su propio sistema de dominancia política. Los otros…bueno, los demàs vivirán según o ordenen los primeros.
¿Què, al final de este capìtulo, representa para Israel y cuàles son las alternativas?
Por màs que no lo queramos, la pròxima Palestinas se establecerà, como fuere, en Yehuda, Shomron y Gaza, con el aval de la Organizaciòn de las Naciones Unidas.
Lo que se necesita ver es cuàn fuertemente unidos estamos. Nuestra “quinta columna” – JStreet, Haaretz,etc., y los “políticamente correctos”- haràn todo lo posible por adherirse a las intenciones de demostrar que Israel està manejado por un régimen excluyente y represor. Viste mucho, aùn sin ser verídico.
No somos bendecidos del don de prever el futuro, pero eso es lo que sucederà.Pero como siempre, estaremos preparados.
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