Mensaje del Ing. Simón Neumann
Presidente del Consejo Directivo del CDI
Firma del Convenio Punto CDI Monte Sinaí
Estimado Simón Salame Micha, Presidente de la Sociedad de Beneficencia Alianza Monte Sinaí.
Estimados amigos de las mesas directivas del Centro Deportivo Israelita y de Alianza Monte Sinaí.
Esta noche seguramente marca un episodio especial en la historia de la Comunidad Judía de México, y parece una coincidencia, con el hecho de que hace cien años, se constituían sus fundamentos institucionales, cuando la colectividad de judíos provenientes del Imperio Otomano, principalmente de las regiones de Siria, Grecia y los países balcánicos, así como de Rusia y Europa Oriental, comenzaron a llegar a México como inmigrantes, ante los cruentos hechos que ocurrían en las últimas décadas del siglo XIX y principios del siglo XX, en los países que por siglos habían sido su lugar de residencia.
Desde entonces, la identidad se mostraba a través de nuestras tradiciones ancestrales. Las costumbres religiosas fomentaban la unión y así, las primeras instituciones, proveían los espacios para desarrollar una nueva vida judía.
Los 100 años de Alianza Monte Sinaí marcan ese inicio, al haber cimentado el futuro de la Comunidad Judía de México, en su extensa visión para establecerse en un país como México, imitando la forma de vida de aquellas comunidades dejadas atrás.
Destaca el compromiso de muchos hombres de bien, de firme convencimiento de construir, de dejar profundos legados, que sirvieron de ejemplo para que desde otra perspectiva, surgieran grupos como lo fue en 1931 la Asociación Deportiva Israelita Macabi, mostrando una gran convocatoria que permitiría que un pequeño grupo de amigos vislumbraran la idea de crear una nueva institución deportiva, que aglutinara a todos los miembros de la Comunidad Judía de México, y así el 15 de octubre de 1950, el Centro Deportivo Israelita fue fundado.
Con ello se ha logrado conformar lo que hoy somos como judíos en un país en el que hemos podido desarrollarnos y destacar en muchos ámbitos, y en el que también han nacido nuevas generaciones.
Me permití hacer algo de historia, con el fin de transmitir la importancia que tiene para el ser humano de convicciones firmes, ser un pionero, ser precisamente aquel individuo que se propone objetivos que rompen paradigmas, que mantienen ideales y luchan para que sus proyectos se conviertan en realidad. Estoy seguro que en esta reunión, contamos con esa empatía clara.
Esa firme convicción de crear un lugar para todos los miembros de la Comunidad, sigue vigente. Unir a todos los sectores y núcleos de la Comunidad Judía de México, reitero, sigue y seguirá siendo, la visión del CDI. Nunca se escatimarán esfuerzos por lograr esta meta, siendo el fundamento básico de la creación de nuestra Institución.
La conjunción de esfuerzos de tan loables instituciones, no sólo brindará beneficios a todos los miembros de la Comunidad, servirá como ejemplo para que estas alianzas procuren una estructura comunitaria más solida y fuerte, sustentada en los principios de favorecer a todas las familias del Yshuv. Esta alianza estratégica será el principio de un nuevo porvenir de la Comunidad Judía de México. Será sin duda, un nuevo camino que se abre ante múltiples posibilidades.
Punto CDI Monte Sinaí es un nuevo modelo comunitario que brindará un futuro más sólido para nuestra Comunidad, una nueva forma de crear espacios, en donde las virtudes, las habilidades, la vocación por el deporte, la cultura y el arte, que tanto atrae a nuestra gente, fructifique en individuos, familias y una sociedad sana en cuerpo y en espíritu.
Unir esfuerzos es hoy un nuevo reto. Deseo con mucha emoción que este camino, nos lleve a cosechar deliciosos frutos en estas hermosas instalaciones, que en cuanto comiencen a funcionar, de inmediato se llenarán de vida, de gratos momentos, convivencia y muchos éxitos.
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