El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) urgió ayer al gobierno de Siria adherirse al compromiso para poner fin a los combates en el lapso de 48 horas y expresó su “preocupación” porque Damasco no retiró tropas de áreas pobladas ni puso fin al uso de armas pesadas, cuando el plazo para hacerlo vencía ayer.
Más de mil personas han muerto en la última semana, según activistas.
“Miembros del Consejo de Seguridad están unidos en su preocupación de que el plazo (del martes) haya pasado y la violencia en los últimos diez días se haya intensificado”, declaró a periodistas la embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice, presidenta del Consejo.
Damasco y la oposición armada acordaron con el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe a Siria, Kofi Annan, un alto el fuego a las 06:00 horas del jueves. Rice dijo que el Consejo cree que Siria “ahora tiene la oportunidad de cumplir sus obligaciones el jueves”.
Desde Estambul, donde visitó un campamento de refugiados sirios, Annan dijo que aún hay tiempo para implementar el cese del fuego. En una carta, dio un panorama sobre los acontecimientos vinculados con el plan de seis puntos para poner fin al conflicto en ese país.
Annan insistió en que su iniciativa de paz sigue “muy viva”, en parte porque no hay otra alternativa viable. La ONU ha descartado cualquier intervención militar como la que ayudó a deponer a Muammar Gaddafi en Libia, y varias rondas de sanciones y otros intentos de aislar al presidente Bashar al-Assad han hecho poco para detener el derramamiento de sangre. “Si usted lo quiere sacar (el plan) de la mesa, ¿con qué lo vamos a reemplazar?” dijo a Annan a periodistas en Hatay. El colapso de la tregua podría catapultar a Siria a una guerra civil declarada.
Annan, quien llegó ya a Teherán para discutir, hoy, la crisis siria con el presidente Mahmud Ahmadineyad y con el canciller, Alí Akbar Salehi, se dirigirá el jueves a través de una videoconferencia al Consejo de 15 naciones.
Activistas sirios denunciaron que las armas no han callado y que más de 70 personas murieron el martes, incluyendo tres menores y cinco mujeres, principalmente en las provincias rebeldes de Homs y Hama, en el centro del país.
Aunque el ministro sirio de Exteriores, Walid al Mualem, anunció en Moscú la retirada de una parte de las tropas, los opositores difundieron videos que mostraban disparos y lanzamientos de proyectiles por las fuerzas leales al régimen de Al-Assad.
La ONU es corrupta porque ya predominan los árabes en sus filas, y por eso le da mas tiempo a Siria que esta matando miles de civiles y ¿cómo es que presiona a Israel que es el único país democrático en el Oriente?
Y no quiere detener a ese malvado de Assad, es un tirano que no ha de alcanzar misericordia de Dios.