El ministro de Exteriores, Eli Cohen, recibe una lluvia de críticas por la difusión de su delicado encuentro con su homóloga libia, Najla Mangoush.
La publicación de la reunión desató en Libia violentas protestas y condujo a la suspensión de la canciller del país árabe.
Según Trípoli, el encuentro que tuvo lugar en Italia no fue oficial y no refleja la posición del gobierno libio. En cambio, Cohen lo calificó como “histórico” y aseguró que “se trata del primer paso para una relación entre Israel y Libia”.
Mientras tanto, funcionarios del Ministerio de Exteriores en Jerusalén dijeron que la dirigencia libia sabía que el encuentro sería difundido, de acuerdo con un reporte de la emisora pública Kan.
De cualquier manera, fuentes familiarizadas con los sensibles vínculos entre Israel los países con los que no mantiene relaciones explicaron que esos contactos en general son mantenidos en secreto y que se teme por la vida de la ministra libia, que según los informes ha huido a Turquía.
Altos funcionarios del Gobierno, citados por el Canal 12, también condenaron la decisión del ministro de publicar la información sobre el encuentro, destacando que el ministro Cohen ha generado un grave daño político a Israel y que “disuadirá a los líderes del mundo árabe de acercarse a nosotros”.
Aquellos que criticaron a Cohen pusieron de relieve el “enorme daño personal causado a la ministra libia”.
En la misma sintonía, el líder de la oposición, diputado Yair Lapid, manifestó:
“El incidente con la ministra de Exteriores libio es un acto de amateurismo, irresponsable y una grave falta de juicio. Es una mañana de desgracia nacional y de arriesgar vidas humanas por un titular” en los diarios, apuntó Lapid.
El exministro de Defensa y líder del opositor partido Unión Nacional, diputado Benny Gantz, también criticó a Cohen por su manejo irresponsable de un “asunto delicado y serio”.
“Cuando haces todo por las relaciones públicas y los titulares, sin responsabilidad y visión de futuro, esto es lo que sucede en las relaciones exteriores, la seguridad, la economía o la educación. El gobierno de Netanyahu es un gobierno negligente y fracasado que debe llegar a su fin”, afirmó Gantz.
“El ministro Eli Cohen debería poner las llaves sobre la mesa y dimitir. El daño que ha causado no tiene precedentes. Una difusión apresurada ha arruinado la vida de la ministra libia que ha tenido que huir a Turquía y ha causado daños internacionales a Israel”, aseveró Meirav Michali, jefa del Partido Laborista.
«Ningún funcionario internacional serio y discreto querrá reunirse con un ministro de Exteriores cuyo único propósito es obtener capital político y acumular ‘me gusta’ en Twitter», dijo Michaeli.
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