Característica inherente a algunos de los platillos mexicanos mas connotados, tales como el mole o el pozole, es que se disfrutan mas en el recalentado.
Esto no quiere decir que se coma exactamente lo mismo, sino que se paladea una versión tal vez mas intensa y mas sápida de un plato conocido en el día anterior, o días atrás-
Con la pasión sucede algo similar, ya que un reencuentro demanda mucha más creatividad para poder revivir esos sabores propios del recalentado.
Encontramos dos personajes que ya conocimos anteriormente, a través de ese juego del dominio y la sumisión, donde no hay límites; o precisamente son esos “obstáculos”, lo que en un momento pusieron fin a una relación tortuosa y atormentada.
Viene el recalentado de la pasión”; pero ahora ya la sumisión tiene ciertas condiciones, resumidas en que no hay reglas ni castigos, a la vez que los secretos no tienen cabida.
Es precisamente lo incierto y lo desconocido lo que ahora vendrá a dar cabida a un nuevo enfoque de esta pasión ya conocida; pero que ahora salta a una nueva dimensión, con colores muchos.
Anastasia y Christian se encuentran en atmósferas diferentes, pero en tiempos iguales, aunque en situaciones similares, donde resulta imprescindible brindar a su relación un nuevo enfoque…y posiblemente un cambio.
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Ahora toca ver qué nos depara “Cincuenta Sombras Más Oscuras”.
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