Hace algunos años (ni tantos, por cierto), llegó a la pantalla un personaje sumamente peculiar, más que nada por despreciable: “Mi Villano Favorito”.
Villanos hay muchos; y hasta ya existe un concurso de ellos, para saber, precisamente, quien es el más despreciable de todos. Pero, bueno, esa es botonadura de otra camisa.
Lo que más llamó la atención es ¿cómo un ser tan vil, podría tener a su servicio a un grupo de pequeñines bondadosos, trabajadores y leales?
Ellos son “Minions”, seres que se remontan a millones de años, y cuya misión en la vida es encontrar a un amo que los guíe, o corren el riesgo de desaparecer.
No importa qué tan mal los trate, o cuanto les exija…mientras más despreciable ¡mejor!
https://www.youtube.com/watch?v=PrOQ8FrmpxQ
Como acabamos de ver, Kevin, Stuart y Bob, han asumido la encomienda de encontrar un nuevo amo.
No es sencillo el viaje, porque ya no viven en la época de la prehistoria, y los retos son mucho mayores.
La travesía comienza desde la región helada donde ellos viven, y atraviesan una serie de imprevistos, hasta que , sin darse cuenta, llegan a Nueva York, en la época dorada, controversial, conflictiva y creativa del año 1968.
Ahí da inicio realmente su nueva aventura, repleta de risas, situaciones imprevistas, y hasta complicidad aparente con una familia de verdaderos pillos, y la villana más villana de todas…¡y todos!
Nueva York es tan sólo el inicio de una nueva visión vivencial, que los lleva hasta los mismos cortesanos, las masmorras más crueles, y una nueva amiga de cuatro patas.
Es así como Kevin, Stuart y Bob (¡y todos sus amigos Minions!), se revelan como un trío de personajes, de lo más cómico que pudo haber vivido la etapa de los sesentas, con todo y Beatles, creatividad constante y esa diversión que sólo puede emanar de unas criaturas llamadas “MINIONS”.
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