El presidente de Irán, Mahmud Ahmedinejad, manifestó que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de 58 años, cayó como un “mártir” de una “enfermedad sospechosa”, aparentemente, en referencia a las acusaciones del vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, de que el cáncer que terminó con su vida fue inoculado por sus “enemigos históricos”.
“No tenemos ninguna duda, y llegará el momento indicado de la historia en que se pueda conformar una comisión científica, de que el comandante Chávez fue atacado”, dijo Maduro en relación al cáncer que arrastraba desde hace más de veinte meses el jefe de Estado.
Maduro dijo que “ha habido casos en la historia, demasiados casos en la historia” sobre este tipo de agresiones, y apuntó que “el último, más resonante” fue el del líder palestino Yaser Arafat.
“A nosotros en nuestro corazón no se nos quita eso, pero además ya tenemos pistas, y en su momento llegará el momento de desarrollar científicamente una investigación de estas características”, insistió Maduro, al tiempo que anunciaba la expulsión de dos agregados de la embajada de Estados Unidos por “proponer proyectos desestabilizadores” a militares venezolanos.
Con la muerte de su presidente, Venezuela se encamina a nuevas elecciones en los próximos 30 días. Mientras que los constitucionalistas dicen que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, debería asumir transitoriamente hasta las elecciones; el canciller, Elías Jaua afirmó, en cambio, que Maduro dirigirá interinamente al país petrolero.
El Ministerio de Exteriores de Jerusalén declinó comentar la muerte Chávez. “No tenemos ninguna valoración sobre esa cuestión”, puntualizó el portavoz de la cancillería Yigal Palmor.
Chávez llevó las relaciones entre Venezuela e Israel a su nivel más bajo. En enero de 2009, el gobierno de Caracas expulsó al embajador Shlomo Cohen y rompió relaciones con Israel, a raíz de la operación “Plomo Fundido” contra el grupo terrorista islámico Hamás que controla la Franja de Gaza.
En 2011, viceprimer ministro, Moshé Yaalon, declaró que con la complicidad de Venezuela, Irán estaba armando una “infraestructura terrorista” en América Latina para atacar a objetivos norteamericanos e israelíes.
En tanto que el viceministro de Exteriores, Danny Ayalon, acusó a Chávez de haber transformado a Venezuela en una “base de avanzada” de Teherán en América Latina.
Chávez hizo trece visitas a Irán entre 1999 hasta el día de su muerte. En tanto que Ahmedinejad visitó seis veces Caracas desde 2005.
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