Funcionarios de seguridad nacional israelíes sentados alrededor de la misma mesa el martes por la mañana con sus homólogos de Arabia Saudita, Qatar, Bahrein, Omán y los Emiratos Árabes Unidos, hablaron de la situación humanitaria grave que se desarrolla en la Franja de Gaza.
La cumbre en Gaza, convocada por Jared Kushner, yerno del presidente de los Estados Unidos y asesor principal sobre la paz en Oriente Medio, así como Jason Greenblatt, su representante especial para las negociaciones internacionales, marca un momento sin precedentes para la diplomacia israelí, ya que su diálogo con funcionarios de los estados árabes se reconoce públicamente por primera vez.
La administración Trump planeó la reunión en el transcurso de varias semanas y publicó una lista de asistentes la mañana de la cumbre, que también incluyó funcionarios de Egipto, Jordania, Canadá y varios países europeos.
Los funcionarios de la Autoridad Palestina no asistieron a la reunión.
“Lamentamos que la Autoridad Palestina no esté aquí con nosotros hoy”, mencionó Greenblatt en un discurso de apertura a la conferencia. “Esto no se trata de política. Se trata de la salud, la seguridad y la felicidad de la gente de Gaza y de todos los palestinos, israelíes y egipcios”.
“Como saben, hoy estamos aquí para considerar ideas sobre cómo abordar los desafíos humanitarios en Gaza, un tema que siempre estuvo en la vanguardia de todas nuestras mentes”, continuó Greenblatt. “Ciertamente etuvo en la mía”.
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