En un ataque perpetrado en la localidad de Mdagali el 13 de enero, dos mujeres que llevaban sendos bebés se inmolaron tras pasar un control de seguridad, matando a otras cuatro personas.
En el control fueron interceptadas otras dos suicidas, que no llevaban bebés y que se inmolaron en el lugar, sin causar otras víctimas.
A principios de diciembre, dos suicidas mataron al menos a 45 personas tras inmolarse en un mercado de esta misma localidad, situada en el estado de Adamawa.
La secta islamista Boko Haram, que en 2015 juró lealtad al grupo yihadista Estado Islámico, ha utilizado a mujeres y niñas para llevar a cabo atentados suicidas en el país.
El Ejército nigeriano ha logrado numerosos avances en los últimos meses ante el grupo extremista, que ha respondido incrementando sus atentados contra civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.
Boko Haram surgió en 2002 y siete años más tarde lanzó una ofensiva militar tras la muerte bajo custodia de su hasta entonces líder, Mohamed Yusuf, que ha dejado miles de muertos.
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