Robert Dixon (foto), un no judío que vive en el barrio River Park de las afueras de Sacramento, derribó en la noche del lunes una instalación consistente en una bandera estadounidense y otra israelí, ambas con esvásticas, ubicada desde hace varias semanas al frente de una casa vecina.
“Me sentí obligado a hacerlo”, explicó ayer, martes, a un diario local, y aclaró que dejó en su lugar una flameante bandera palestina.
Dixon contó que, mientras tanto, intercambiaba insultos con el dueño de casa: “Lo llamé cobarde y él, algo así como extremista violento”.
Simultáneamente, cientos de personas se reunieron en la escalinata de la Legislatura de Sacramento para manifestarse contra el antisemitismo y recientes incidentes de odio y parlamentarios locales trabajaban de remover la instalación por la vía legal.
Dixon relató que dijo que en enero protestó en la Universidad de California-Davis después que el Senado estudiantil adoptó una resolución en la que instaba a la casa de estudios a desinvertir en compañías que hicieran negocios con Israel.
Ayer, el propietario colocó un cartel plagado de agravios no antisemitas en letras azules.
Artículos Relacionados: