El historiador y profesor de los institutos de Jaca Álvaro López Asensio ha conseguido que la Universidad de Zaragoza tome en consideración la modificación de la guía docente de cada asignatura relacionada con Historia Medieval y Moderna. Esto supone que, en breve, se estudiará el pasado y legado judío en la Universidad. Todo ello ha sido posible gracias a la reunión que ha mantenido con el director general de Universidades del Gobierno de Aragón, y con la decana de la Facultad de Filosofía y Letras de dicha Universidad.
EL HISTORIADOR ÁLVARO LÓPEZ ASENSIO LLEVA VARIOS AÑOS REIVINDICANDO LA IMPORTANCIA DE DIFUNDIR UNA PARTE DE DESCONOCIDA DE NUESTRA HISTORIA
El historiador Álvaro López Asensio lleva varios años reivindicando la importancia de difundir una parte de nuestra historia que todavía no se conoce ni se estudia en los libros de texto de Secundaria y Bachillerato no solo en Aragón, sino en ninguna comunidad autónoma del Estado español.
En los libros de texto de Secundaria y Bachillerato, tan solo aparece un párrafo sobre la expulsión de los judíos de 1492, pero no dedican tan siquiera un capítulo o lección al pasado y legado de sus más de 2.000 años de presencia en Aragón y Sefarad.
Ante este vacío histórico, la Consejería de Educación del Gobierno de Aragón, dirigida por Felipe Faci, le encargó, junto a Javier González Ruiz, la elaboración de una Unidad Didáctica para 2º de ESO y otra para 2º de Bachillerato (con sus estándares de aprendizaje), con el objetivo de que el pasado y legado judío, contenido en dichas unidades, se imparta en la materia de Historia de España.
LA EL PASADO Y EL LEGADO JUDÍO, EN LOS INSTITUTOS ARAGONESES
Estas unidades han sido aprobadas y enviadas a todos los institutos de Aragón con la instrucción de que sus respectivos departamentos de Historia lo impartan ya en el próximo curso. La Consejería de Educación los incluirá en la modificación del currículo escolar.
El pasado 26 de octubre, ambos historiadores mantuvieron una reunión con el director general de Universidades del Gobierno de Aragón, Ramón Guirardo Guillén, donde le expusieron todo el procedimiento realizado y le solicitaron que impulsara en la Universidad de Zaragoza la enseñanza monográfica del pasado, legado y la herencia judía en Aragón y Sefarad.
Posteriormente, el pasado16 de noviembre, también se reunieron con la decana de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza, Elena Barlés, a quien le informaron de que, en la actualidad, el profesorado que imparte Historia de España en los institutos aragoneses tiene serias dificultades a la hora de impartir conocimientos sobre el legado y pasado judío.
EL LEGADO JUDÍO, EN LA UNIVERSIDAD
«Existe un vacío histórico porque apenas se aborda en profundidad y de manera sistemática su enseñanza en la Universidad, que prioriza más otros estudios, capítulos y disciplinas, que el legado cultural, patrimonial, lingüístico y gastronómico de los judíos en Aragón y Sefarad», explica López Asensio.
La decana de la Facultad de Filosofía y Letras, tras escuchar los argumentos y las carencias pedagógicas e históricas en esta materia, va a iniciar los trámites para modificar la guía docente de cada asignatura relacionada con Historia Medieval y Moderna, con el fin incluir y regular el estudio de la historia de los judíos de Aragón y Sefarad en la Universidad de Zaragoza de una manera reglada.
UNIDADES DIDÁCTICAS Y MANUAL DEL PROFESOR
También se le entregó las Unidades Didácticas de 2º de ESO y 2º de Bachillerato, así como un Manual del Profesor, con el fin de que el Departamento de Medieval tenga elementos suficientes para su enseñanza o adaptación programática y curricular.
Su estudio en la Universidad contribuirá a que el actual alumnado y futuro profesorado de Secundaria y Bachillerato que imparta la materia de Historia de España conozca mejor este capítulo olvidado y esté suficientemente preparado para enseñarlo.
«Su estudio también ayudará a que el alumnado universitario conozca mejor no solo nuestra historia, sino incluso el desprecio, la marginación y la persecución que vivió la comunidad judía durante la Edad Media. Un recurso pedagógico que ayudará a educar en convivencia y respeto al diferente, valores esenciales que contribuirán a superar la intolerancia y violencia tan arraigadas en nuestra sociedad», concluye el historiador.
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