El vicepresidente de China Wang Qishan se reunió con líderes israelíes y palestinos como parte de su viaje oficial de tres días a la región.
Wang Qishan visitó Cisjordania el martes, donde se reunió con el primer ministro palestino, Rami Hamdallah. También dejó una ofrenda floral sobre la tumba del fallecido líder palestino Yasser Arafat y visitó la Iglesia de la Natividad de Belén.
Más tarde, se reunió con el presidente Reuven Rivlin en Jerusalén. “Las relaciones entre China e Israel son excelentes, basadas en el respeto mutuo, un pasado compartido y un futuro prometedor”, comentó el presidente. Añadió que las buenas relaciones entre los dos pueblos comenzaron en el siglo X con la comunidad judía de Kaifeng.
El vicepresidente Qishan agradeció al presidente su bienvenida y comentó: “Las relaciones entre los dos países se basan en una larga historia compartida, como usted mencionó, y también en la asociación para la innovación”.
“Israel no tiene grandes recursos naturales, pero el milagro del desarrollo se basa en el tremendo capital humano de esta nación. Los seres humanos son el activo más precioso”, subrayó Qishan.
El viaje de Wang a Israel ilustra los vínculos entre los dos países. Se han convertido en socios comerciales cercanos, con China mostrando interés en los desarrollos israelíes en la agricultura, el agua y otras tecnologías ambientales.
Wang, un confidente del presidente Xi Jinping , es uno de los funcionarios chinos de mayor rango que visitan Israel desde que los países establecieron relaciones diplomáticas en 1992.
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