Un abrazo fraternal para mi amigo Rubén Cortés
Estimado Dinamita:
Mil, pero mil felicidades por tu gran pelea este sábado. Sin duda fue una pelea memorable y muy difícil de olvidar.
Me recordó mucho la pelea de Julio César Chávez contra Meldrick Taylor (cuando Julio lo noqueó en el último round cuando iba perdiendo la pelea por puntos).
Tu pelea fue un peleón. No tienes idea de cómo la disfruté. Bueno, disfruté muchísimo de tu triunfo y del knock out, pero…. ¡Cómo me hiciste sufrir!
Y te platico por qué:
Me acuerdo cuando te entrevisté hace un año en Platicando con…
Hablamos mucho de cómo los jueces te transaron en la última pelea y como Las Vegas era un banquete de corrupción (casi o más corrupta que nuestros políticos ).
Que a Bob Arum lo único que le importaba era la lana y que hacía lo necesario con los jueces para asegurarse que Pacquiao ganara esa pelea sea como sea.
Bueno, mi admirado Juan, así se empezaba a escribir otra vez la historia: Hasta el quinto round, —según los jueces— Pacquiao ya te iba ganando. ¿Lo puedes creer?
¡¡¡Cuando todo el mundo había visto cómo habías ganado el primero, el segundo y el tercer round!!!
¿Te imaginas?
¡¡¡Ya se estaba cocinando otra vez la ratería!!!
Y si la pelea no termina como terminó, dudo mucho que los jueces te hubieran dado el triunfo si es que la pelea hubiese llegado a los 12 rounds.
¿Y te digo la verdad? En el sexto round, me saqué de onda.
Pensé que te pararían la pelea a más tardar en el octavo round. En la tele se veía tu cara hecha un desastre.
Se veía que la sangre no iba a dejar de parar en tu nariz. Y la verdad es que se veía que Pacquiao te la podía ganar.
Y la única forma en que podías haber ganado esa pelea fue como la ganaste: Noqueándolo.
Ese cruzado de derecha fue magistral. Hacía años que no veía uno así. Fue un cruzado perfecto.
Inclusive, tenías que haber visto la cara de susto de dos espectadores sentados en la primera fila cuando vieron caer a Manny enfrente de ellos.
Les sacaste un pedo del tamaño del mundo. Los pobres pensaron en lo peor.
Hiciste una pelea muy valiente y muy inteligente y la verdad eres un gran campeón mundial.
Lo que más alegría me dio —además de tu triunfo— fue cómo le callaste la boca al mamón de Arum y a los jueces corruptos de la pelea.
Se la callaste a los filipinos que esta vez no les quedó de otra que llorar. Y también se la callaste al mundo que no creía en ti. En fin, fue una gran noche para México. Gracias a ti. Y sin duda, un gran regalo de Navidad.
Por último, sería injusto no mencionar al gran Nacho Beristain. Tu gran entrenador y gran maestro. Los dos hicieron un gran equipo. Y los dos lograron este gran éxito.
Por último, viene la pregunta de los 64 mil millones: ¿Qué sigue después de esta pelea?
¿Te vas a retirar? ¿Una quinta pelea con Manny? ¿Una nueva con el que anteriormente le ganó a Pacquiao?
En fin, sólo tú y tu conciencia lo saben.
Te deseo que la decisión que tomes sea la decisión más sensata y que la hagas pensando en tu familia y en tus 39 años. Y a nombre de todos los mexicanos, mil gracias por tu valentía, tu corazón y tu triunfo.
Después de cuatro peleas, finalmente dejaste de ser el ¡Campeón sin Corona! ¡Feliz Navidad!
P.D. Por vacaciones, nos volveremos a reencontrar el martes 8 de enero. ¡Felices fiestas!
Felicidades Juan Manuel Marquez y tambien para Carlos por esta excelente carta.
Shalom.
Hola Sr. Carlos.
Escuche hace 2 días la entrevista que le hizo hace unos meses Fernanda Familiar en su programa. (Seleccionado para escuchar en estos días como uno de los mejores programas). La entrevista me pareció excelente, muy natural y quiero decirle que con lo poco que Fernanda hablo de su libro me gustaría tenerlo en mis manos y disfrutarlo, desafortunadamente no cuento con los medios económicos para adquirirlo (de momento, estoy en proceso de tenerlos). Me gusta leer, y siempre que tengo oportunidad entro a las librerías para aprovechar adquirir algún buen libro a buen precio.
No tengo nada que perder si me dice no o simplemente no contesta mi mensaje, pero no quiero perder la oportunidad de pedirle por favor si me puede obsequiar un ejemplar de su libro. Le estaré muy agradecida. No omito comentarle que en octubre del 2012 cumpli 60 años y aun tengo muchos deseos de trabajar para no ser una carga para los hijos y lo mas importante: No estar cruzada de brazos mirando como sigue pasando el tiempo y esperando (sentada) que me caiga del cielo lo necesario para vivir. Tengo el presentimiento que en ese libro escrito por un gran LIDER encontrare algo que me ayude en mi proyecto de superación.
Reciba un cordial saludo y perdón por el atrevimiento.
Atentamente.
Maria de Jesus Camcho Castellanos.