En medio de los preparativos realizados por la Autoridad Palestina con el fin de celebrar las elecciones del Consejo Legislativo Palestino, la presidencia y del Consejo Nacional Palestino y ante las recientes conversaciones en El Cairo en anticipación a las elecciones, a las que asistieron representantes de las distintas facciones palestinas, el diario palestino en Jerusalén Oriental Al-Quds, publicó un artículo escrito por el director del Buró Político de Hamas Ismail Haniya, con el objetivo de «aclarar las posturas y visión de Hamas sobre el tema de las elecciones».
En el artículo, publicado el 17 de marzo del 2021 Haniya afirma que Hamas ve las elecciones como forma de poner fin a la querella palestina; construir un nuevo sistema político que incorpore a todas las facciones palestinas, tanto dentro de Palestina como en la diáspora y unir los esfuerzos que realizan los palestinos y toda la nación árabe e islámica para de esta manera enfrentar a Israel y detener el proceso regional de normalización de relaciones con este. Haniya enfatiza que Hamas se halla comprometido con las elecciones y con los entendimientos alcanzados en este contexto y no tiene intención de desatender ni descuidar estos entendimientos.
En el artículo de Haniya se destacan dos puntos esenciales. Primero, este enfatizo que Hamas prefiere postularse para las elecciones del Consejo Legislativo Palestino, programadas para mayo de este año, como parte de «una lista nacional conjunta que abarca el espectro más amplio posible de fuerzas unidas a nivel nacional». Segundo, Haniya enfatiza que después de las elecciones, los palestinos tendrán que formular una estrategia para confrontar a Israel «utilizando todas las formas de lucha posibles y por haber para nuestro pueblo – principalmente la resistencia militar, mientras se enfoca en librar una resistencia popular en esta etapa actual del conflicto».
Estas dos declaraciones dan lugar a importantes preguntas respecto a las intenciones de Haniya y sus implicaciones prácticas. El tema de una lista conjunta ha sido debatido durante algún tiempo por funcionarios de Hamas y de Fatah, pero aún no ha sido resuelto. La sugerencia es que Fatah y Hamas junto a todos los demás movimientos que deseen unirse a la lista, acordarán el número de miembros de cada movimiento y su lugar en la lista. La ventaja de una lista conjunta compuesta por Fatah y Hamas es que le permite a ambos movimientos asegurar lugares para sus miembros en el próximo Consejo Legislativo Palestino y también determinar de antemano la división de escaños que ocurrirá entre ellos – de modo que ningún bando tenga que enfrentarse a una victoria aplastante del otro. Por lo tanto, una lista conjunta puede servir como compromiso efectivo, asegurando que las elecciones realmente se celebren y no sean pospuestas nuevamente y que el Consejo Legislativo Palestino renovará sus actividades – incluso si su composición no necesariamente refleje la voluntad de todos los votantes.
Para Hamas, que no goza de legitimidad internacional porque se niega a satisfacer las demandas del Cuarteto, es decir, las demandas de reconocer a Israel y los acuerdos con este y renunciar a la lucha armada[1], presentarse en una lista conjunta posee otras ventajas. Entrar en el Consejo Legislativo Palestino con un sello de aprobación de Fatah puede evitar que ocurra un escenario en el que la comunidad internacional se niegue a reconocer el resultado de las elecciones.
Sin embargo, una lista conjunta integrada por Hamas y Fatah es una idea bastante extraña, dada las hostilidades de años entre los dos movimientos y las profundas divisiones políticas que imperan entre ellos y en especial dada la falta de legitimidad internacional de Hamas mencionada anteriormente debido a su total rechazo a las demandas del Cuarteto. En las últimas semanas, funcionarios de Fatah y de Hamas han admitido que una lista conjunta es de hecho poco probable que ocurra ante las diferencias entre las plataformas políticas de los dos movimientos. Sin embargo, esta opción sigue siendo mencionada por otros funcionarios de Fatah y de Hamas y en informes filtrados a los medios de comunicación. Hasta que se publiquen las listas definitivas, el destino de esta iniciativa seguirá sin estar del todo claro.
El segundo punto que el artículo de Haniya destaca es el mensaje ambiguo sobre la estrategia de la resistencia contra Israel que será adoptado después de las elecciones. Tal como se dijo, este punto enfatiza la necesidad de formular una estrategia «basada en el principio de resistencia a través de diversos medios, utilizando todas las formas de lucha posibles y por haber para nuestro pueblo, principalmente la resistencia militar, mientras nos enfocamos más en la resistencia popular en esta etapa actual del conflicto». «Esta vaga declaración aparentemente tiene connotaciones ambiguas. Esta expresa, por una parte, que Hamas sigue comprometido con la lucha armada y de hecho, lo considera la forma principal y más importante de lucha, pero por otra parte, en la esta etapa actual Hamas desea centrarse principalmente en la resistencia popular.
La declaración sobre el centrarse en la resistencia popular en la etapa actual puede tener como destino los oídos del Cuarteto, que le exige a Hamas abandonar el camino de la violencia. Según informes, en preparación para las ya planificadas elecciones de la Autoridad Palestina, Hamas acordó renunciar temporalmente a la resistencia armada y centrarse en la lucha popular, con el aparente propósito de convencer al Cuarteto y a la comunidad internacional de que reconozcan las elecciones palestinas y sus resultados. Hamas no ha negado dichas declaraciones aunque, al mismo tiempo, sus funcionarios continúan fomentando la resistencia armada.[2] Por lo tanto, no se puede descartar que esta sea una táctica temporal ideada por Hamas, que será implementada al menos hasta la finalización de las elecciones, con el objetivo de asegurar el establecimiento de nuevas instituciones en las que Hamas posea representación.
Artículo de Haniya en el diario Al-Quds (Fuente: Al-Quds, East Jerusalén, 17 de marzo, 2021)
Lo siguiente son extractos traducidos del artículo de Haniya publicado el 17 de marzo, 2021 en el diario Al-Quds.[3]
«… A medida que el tren electoral emprende su jornada, Hamas insistió en que las elecciones por sí mismas fueran precedidas por un diálogo nacional serio y responsable entre las diversas facciones palestinas, con el propósito de trazar una hoja de ruta para completar las tres etapas del proceso – las elecciones al Consejo Legislativo Palestino, el de la presidencia y el Consejo Nacional Palestino – y eliminar cualquier obstáculo que se presente en el camino… Todos deben asumir la responsabilidad histórica que requiere el celebrar las elecciones nacionales que permitan al ciudadano palestino realizar su derecho fundamental de elegir a sus representantes para las diversas instituciones representativas del liderazgo. Nosotros no debemos permitir una situación en la que la escogencia del ciudadano sea usurpada o eludida o su libre albedrío le sea negado…
«Hamas quiere que las elecciones sean el primer paso en una reforma integral del hogar palestino y la reconstrucción del sistema político palestino, para que este pueda enfrentar los actuales desafíos que enfrenta la arena palestina e incluya a todas las fuerzas políticas activas de nuestro pueblo, dentro de Palestina y en la diáspora, sobre la base de una unidad, camaradería e integración. El resultado de este proceso será el fin definitivo de la situación de división y el fortalecimiento de las instituciones palestinas, para que ningún tipo de desacuerdos políticos a futuro sea capaz de desarrollarse nuevamente en una querella. Al contrario, nuestro sistema político será capaz de contener eficazmente los desacuerdos y disputas que puedan surgir y hacer frente a los cambios que se produzcan en esta muy particular situación política…
Además, Hamas desea que estas elecciones allanen el camino para unir esfuerzos de la nación árabe y musulmana en su totalidad dentro del contexto de la causa palestina y para neutralizar todas las amenazas derivadas de la vulnerabilidad estratégica y peligrosa en la región. Todo esto será logrado deteniendo todos los acuerdos de normalización de relaciones y añoranzas por la ocupación israelí a expensas de los derechos de nuestro pueblo y de los santuarios sagrados del Islam y del cristianismo.
«Con el fin de lograr todos los objetivos nacionales en estas elecciones, Hamas determinó que su forma preferida de participación en las elecciones al Consejo Legislativo Palestino es formar parte de una lista nacional conjunta que abarque el espectro nacional más amplio posible y comprometerse a preservar los principios nacionales tal como fueron expresados en el Documento de Acuerdo Nacional del año 2006[4] y en las conclusiones de la reunión de los secretarios generales de las facciones palestinas realizada en septiembre, 2020.[5] Después de las elecciones estableceremos un gobierno de acuerdo nacional que abarque a todas las facciones, incluyendo a elementos que no participaron en las elecciones del Consejo Legislativo Palestino tales como el grupo Yihad Islámico Palestino.[6] Este gobierno gestionará las etapas posteriores del proceso electoral, es decir, las elecciones presidenciales y del Consejo Nacional Palestino, supervisará la eliminación de todos los residuos de la división y allanara el camino hacia una verdadera reconciliación entre todos los bandos participantes.
«Es imposible hablar de resolver los problemas internos palestinos y promoverlos sin involucrar todos los componentes de nuestro pueblo palestino, dondequiera que se encuentren en el mundo. Este proceso no puede limitarse a nuestro pueblo dentro de Palestina, porque los miembros de la diáspora palestina son parte auténtica de nuestro pueblo, que han pagado muy caro por haber sido expulsados de su tierra y han permanecido en el exilio durante décadas. Ellos están en el centro del sagrado tema del derecho a retornar y constituyen uno de los aspectos más importantes de la lucha en contra de la ocupación. En consecuencia, Hamas siempre ha adoptado la clara postura de que las elecciones generales deben conducir al establecimiento de un nuevo Consejo Nacional Palestino, como paso preliminar hacia la reconstrucción de la OLP sobre una base democrática y renovando sus instituciones sobre la base de crear camaradería – de modo que la OLP, como representante de todo el pueblo palestino, incluya todas las corrientes del pueblo y gestione la lucha política ante la ocupación, plantee el tema palestino en todos los foros y gestione la lucha como parte de este marco nacional general es decir, el Consejo Nacional Palestino.
«Luego de completar, a través de las elecciones, la construcción del sistema político al nivel de la Autoridad Palestina y la OLP, los palestinos – incluyendo todas las facciones, fuerzas políticas, instituciones electas y fuerzas sociales – continuaremos hacia la etapa más importante, siendo esta uno de los objetivos de las elecciones a las distintas instituciones, es decir, la formulación de una estrategia conjunta, unida e integrada en la lucha por lograr los objetivos de nuestro pueblo: liberación y retorno. Esta estrategia se basará en el principio de resistencia a través de diversos medios, utilizando todas las formas de lucha que sean posibles y por haber para nuestro pueblo – principalmente la resistencia militar, mientras se enfoca en la resistencia popular en la etapa actual. Además, como parte de esta estrategia, las responsabilidades se dividirán entre los diversos elementos, teniendo en cuenta las habilidades y la experiencia de cada elemento e institución y su presencia en los distintos ámbitos, de modo que eventualmente se cree un crisol de culturas que fusiona todas las habilidades de nuestro pueblo, que creemos es capaz de alcanzar sus metas y aspiraciones.
«Hamas considera las elecciones generales y sus diversas etapas como una empresa nacional bastante seria… que permite resolver los problemas internos palestinos sobre la base de una verdadera asociación en la que la voluntad del pueblo sea el factor decisivo. Por lo tanto, nosotros actuaremos, tal como hemos actuado en cada etapa y en cada coyuntura, a fin de completar estas acciones, tomando todas las medidas y posturas necesarias y oponiéndonos a cualquier medida que pueda obstaculizar o frustrar dichas medidas.
«Algunos miembros de la élite política cuestionan la eficacia de las elecciones y si estas son un medio para poner fin a la división y alcanzar un entendimiento, o deberían ser el resultado de poner fin a la tal división. Cada una de estas posturas posee su lógica, pero en la situación actual en que vivimos, no necesariamente tomaremos la postura tradicional – sobre todo teniendo en cuenta que, desde el inicio de esta división, hemos probado todas las opciones y métodos. Así que dejemos que las elecciones sirvan como una vía y un medio para lograr un objetivo que ciertamente es un objetivo mayor que las propias elecciones.
«Nuestra misión hoy no es solo determinar la forma en que se desarrollará el proceso, sino determinar el cómo este puede ser exitoso y nos comportaremos honestamente y sin ningún tipo de compromiso con todo lo acordado. Ya cruzamos el punto de no-retorno y no daremos vuelta atrás».
*Y. Yehoshua es vicepresidente de Investigaciones y director de MEMRI en Israel.
[1] El Cuarteto ha presentado estas demandas como condiciones para reconocer a cualquier gobierno del cual Hamas forme parte.
[2] El 21 de febrero, 2021 se informó que la Autoridad Palestina le envió una carta a la administración Biden y al Cuarteto destacando que todas las facciones palestinas que participan en las elecciones, incluyendo aquellas que no forman parte de la OLP, tales como Hamas, están comprometidas con «un estado palestino en las fronteras de 1967» y con una resistencia popular no-violenta. El 23 de febrero, el portal saudita Elaph.com informó que el subdirector del Buró Político de Hamas Salah Al-‘Arouri, transmitió un mensaje al secretario del Comité Central de Fatah, Jibril Al-Rajoub, en el que afirmaba que Hamas «está comprometido con la solución de dos estados y con la establecimiento de un estado palestino en las fronteras de 1967 «y que se convertirá en «un movimiento popular que libra una resistencia desarmada». Véase la serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1562 – Altos Funcionarios de Hamas: Pretendemos postularnos para un cargo en las elecciones mientras mantenemos el lucha armada por la tierra palestina ‘desde el río al mar’, 8 de marzo, 2021.
[3] Al-Quds (Jerusalén)
[4] El Documento de Acuerdo Nacional, firmado el 10 de mayo, 2006 fue elaborado por cinco de los líderes palestinos encarcelados en Israel, en representación de Fatah, Hamas, el grupo Yihad Islámico Palestino, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y el Frente Democrático por la Liberación de Palestina (FDLP). Este incluye la demanda de celebrar elecciones e incorporar a Hamas y el YIP en la OLP.
[5] La referencia es a una videoconferencia realizada el día 3 de septiembre, 2020 de líderes palestinos en Ramala y Beirut, a la que asistieron los jefes de las principales facciones palestinas, incluyendo al presidente de la Autoridad Palestina y presidente de la OLP Mahmoud ‘Abbas y el jefe del buró político de Hamas ‘Ismail Haniyya. La declaración final de la conferencia incluyó el compromiso de celebrar elecciones, incorporar a todas las facciones palestinas en la OLP y establecer un marco conjunto con el propósito de dirigir la «resistencia popular» palestina. Wafa.ps, 3 de septiembre, 2020.
[6] La agrupación Yihad Islámica Palestina (YIP) ha anunciado que no participará en las elecciones al Consejo Legislativo Palestino, debido a que este organismo fue creado como parte de los Acuerdos de Oslo, que la agrupación Yihad Islámica Palestina se niega a reconocer. Sin embargo, esto significa participar en las elecciones del Consejo Nacional Palestino.
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