¿Cómo se puede diferenciar entre una autoestima alta y sana y el orgullo? Aquel que se siente seguro de sí mismo sabe que puede hacer cierta tarea, sabe que está en su poder- pero recuerda que es un regalo del Omnisciente. Por otro lado, el orgulloso siente que no hay nadie más que pueda hacer esa labor. [Se siente indispensable. Nadie le alcanza siquiera a los tobillos.] En otras palabras, el enfoque del primero es solamente en sí mismo sin fijarse en los demás, si hay otros capaces o no, sólo mira para adentro y se evalúa para saber si está preparado para realizar la tarea que se necesita hacer o no. El orgulloso tiende a mirar para abajo a la gente. Se siente que es el único competente para la labor en cuestión.
Ahora, una de las maneras en que podemos adquirir la cualidad de la humildad es adelantarle el saludo a todo individuo. Es común que realicemos juicios mentales sobre los demás- “ése es un pobrecito”…. Si justamente nos acercarnos a ese “pobrecito” y le demás el saludo, sin duda podremos combatir la presunción. Esto es aparte del beneficio de crear un ambiente positivo o de santificar el Nombre de D-s. Si nos esforzamos diariamente en saludar al prójimo no hay duda que podremos bajarle a nuestro engreimiento y volvernos más sencillos.
El orgullo es calificado como el peor de los vicios del carácter. Ojalá podamos aprender esta lección y no ser de los que miran de arriba abajo.
Shabbat shalom
Rab Itsjak Oelbaum
Artículos Relacionados: