Como una paradoja del destino, la estadounidense Fundación Obermayer entregó su Premio a la Historia Germano-Judía, por su apoyo a proyectos femeninos, a Hilde Schramm (foto), hija de Albert Speer, “el arquitecto de Adolf Hitler”, el genocida nazi que lideró el exterminio de unos seis millones de judíos en el Holocausto.
La galardonada vive en Berlín, tiene 82 años, activó en el Partido Verde local y en 1994 creó la Fundación Zurückgeben, cuyo nombre puede traducirse como “restitución” o “devolver”, para respaldar a “las mujeres de origen o fe judía que viven en Alemania y son creativamente activas en el mundo académico y de las artes en reconocimiento a la destrucción voluntaria durante la era nacionalsocialista de los medios de vida” de sus antepasados.
Speer fue ministro de Armamentos y de Guerra y fue condenado a 20 años de prisión en los Juicios de Nuremberg, pero “la claridad es más simple y tuve la oportunidad de trabajar en ello”, explicó su hija, que se diferenció de muchos otros de su generación que reprimieron la pertenencia al nazismo de sus familias.
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