Fuerzas israelíes disfrazadas de mujeres civiles y médicos irrumpieron el martes en un hospital en la ocupada Cisjordania, matando a tres militantes palestinos en una dramática incursión que subrayó cómo la violencia mortal se ha extendido al territorio desde la guerra en Gaza.
Mientras tanto, el Primer Ministro Benjamín Netanyahu descartó una retirada militar de Gaza o la liberación de miles de militantes encarcelados –las dos demandas principales de Hamás para cualquier alto el fuego–, lo que pone en duda los últimos esfuerzos para poner fin a una guerra que ha desestabilizado a todo el Medio Oriente.
El Ministerio de Salud palestino dijo que las fuerzas israelíes abrieron fuego dentro del Hospital Ibn Sina en la ciudad cisjordana de Jenin. Un portavoz del hospital dijo que no hubo intercambio de disparos, lo que indica que se trató de un asesinato selectivo.
El ejército israelí dijo que los militantes estaban utilizando el hospital como escondite, sin aportar pruebas. Alegó que uno de los objetivos había transferido armas y municiones a otros para un ataque planeado, supuestamente inspirado en el ataque de Hamas del 7 de octubre al sur de Israel que desencadenó la guerra en Gaza.
Las imágenes de las cámaras de seguridad del hospital muestran alrededor de una docena de fuerzas encubiertas, la mayoría de ellas armadas, vistiendo velos musulmanes, batas de hospital o batas blancas de médico. Uno llevaba un rifle en un brazo y una silla de ruedas plegada en el otro.
NETANYAHU RECHAZA LAS DEMANDAS CLAVE DE HAMAS
Netanyahu, hablando en un evento en otro lugar de Cisjordania, negó los informes sobre un posible acuerdo de alto el fuego para poner fin a la guerra en Gaza y reiteró su promesa de seguir luchando hasta una “victoria absoluta” sobre Hamás.
“No pondremos fin a esta guerra sin lograr todos nuestros objetivos”, dijo Netanyahu, quien está bajo una creciente presión de las familias de los rehenes y del público en general para llegar a un acuerdo. “No retiraremos al ejército israelí de la Franja de Gaza y no liberaremos a miles de terroristas”, afirmó.
El martes, el máximo líder político de Hamas, Ismail Haniyeh, dijo que el grupo estaba estudiando los últimos términos para un acuerdo, pero que la prioridad era la “retirada total” de las fuerzas israelíes de Gaza y que cualquier acuerdo debería conducir a un cese a largo plazo. fuego.
Dijo que los dirigentes de Hamás habían sido invitados a El Cairo para continuar las conversaciones. Se espera que el grupo militante, que ha alcanzado acuerdos de intercambio desiguales con Israel en el pasado, exija la liberación de miles de prisioneros palestinos -incluidos militantes de alto perfil- a cambio de los rehenes restantes.
Qatar y Egipto, que median con Hamás, han mantenido conversaciones con Israel y Estados Unidos en los últimos días. Funcionarios estadounidenses dijeron que los negociadores habían logrado avances hacia un acuerdo, incluida la liberación gradual de los rehenes restantes durante un período de dos meses y la entrada de más ayuda humanitaria a Gaza.
La guerra en Gaza comenzó cuando cientos de militantes liderados por Hamás irrumpieron en el sur de Israel, matando a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestrando a unas 250 más. Más de 100 palestinos fueron liberados durante un alto el fuego de una semana en noviembre a cambio de 240 palestinos encarcelados por Israel.
https://apnews.com/6acb802328f2408dadc966a954bf4c51
La ofensiva de Israel ha matado a más de 26.700 personas en Gaza, según el Ministerio de Salud en el territorio controlado por Hamás. El recuento del ministerio no distingue entre combatientes y civiles, pero dice que alrededor de dos tercios de los muertos son mujeres y menores.
Un ataque contra un edificio residencial en la ciudad central de Deir al-Balah el martes mató a 11 personas, incluidos cuatro niños, según reporteros de Associated Press que vieron los cuerpos en un hospital.
La guerra ha arrasado vastas zonas del pequeño enclave costero, ha desplazado al 85% de su población y ha empujado a una cuarta parte de los residentes a la hambruna.
LOS HOSPITALES SE HAN CONVERTIDO EN CAMPOS DE BATALLA
Israel ha sido objeto de fuertes críticas por sus redadas en hospitales de Gaza, que han atendido a decenas de miles de palestinos heridos en la guerra y han proporcionado refugio fundamental a los desplazados.
El sistema de atención médica de Gaza, que ya era débil antes de la guerra, está al borde del colapso, colapsado por la gran cantidad de pacientes, así como por la falta de combustible y necesidades médicas debido a las restricciones israelíes y los combates dentro y cerca de las instalaciones.
Israel dice que los militantes utilizan los hospitales como cobertura. El ejército dice que encontró túneles subterráneos en las cercanías de hospitales y localizó armas y vehículos utilizados en el ataque del 7 de octubre en terrenos hospitalarios.
La Media Luna Roja Palestina dijo que las fuerzas israelíes atacaron el martes el Hospital Al-Amal en la ciudad de Khan Younis, en el sur de Gaza, donde se refugiaban unas 7.000 personas desplazadas.
El servicio de rescate dijo que los tanques israelíes alineados frente al hospital disparaban munición real y granadas de humo contra las personas que se encontraban dentro. Raed al-Nims, portavoz del grupo de ayuda, dijo que se ordenó a todos la evacuación.
El ejército israelí dijo sin dar más detalles que sus fuerzas estaban operando en el área del hospital pero no dentro de él.
Represión en Cisjordania
La violencia en Cisjordania también ha aumentado desde el 7 de octubre, mientras Israel ha tomado medidas enérgicas contra presuntos militantes, matando a más de 380 palestinos, según el Ministerio de Salud palestino. La mayoría murieron en enfrentamientos con las fuerzas israelíes durante redadas de detención o protestas violentas.
El ejército dijo que en la redada del martes en el hospital, las fuerzas mataron a Mohammed Jalamneh, de 27 años, quien, según dijeron, estaba planeando un ataque inminente. Los otros dos hombres asesinados, los hermanos Basel y Mohammed Ghazawi, estaban escondidos dentro del hospital y estuvieron involucrados en ataques, dijo el ejército.
El comunicado del ejército dijo que Jalamneh estaba armado con una pistola, pero no mencionó ningún intercambio de disparos.
Hamás reclamó a los tres hombres como miembros y calificó la operación como “un asesinato cobarde”.
El portavoz del hospital, Tawfiq al-Shobaki, dijo que no hubo intercambio de disparos y que Basel Ghazawi estaba paciente desde octubre con parálisis parcial.
“Lo que pasó es un precedente”, afirmó. “Nunca hubo un asesinato dentro de un hospital. Hubo detenciones y agresiones, pero no un asesinato”.
La incursión del martes tuvo lugar en la ciudad cisjordana de Jenin, durante mucho tiempo un bastión de la lucha armada contra Israel y objetivo frecuente de las incursiones israelíes, incluso antes de que comenzara la guerra.
Israel capturó Cisjordania, junto con la Franja de Gaza y Jerusalén oriental, en la guerra de Medio Oriente de 1967.
Israel retiró tropas y colonos de Gaza en 2005, pero impuso un bloqueo asfixiante al territorio, junto con Egipto, cuando Hamás llegó al poder mediante una violenta toma del poder en 2007. Mantiene una ocupación indefinida de Cisjordania, donde más de Medio millón de israelíes viven ahora en asentamientos.
Los palestinos reclaman estos territorios como parte de su futuro Estado independiente, cuyas esperanzas se han atenuado cada vez más desde que comenzó la guerra.
Los judíos son muy valientes y luchadores. que bueno con Netanyahu a la cabeza de las operaciones. Vencerán como siempre.