Veto a un jugador judío de LaLiga por la guerra en Gaza: en Burgos dicen no a Weissman

“Weissman not welcome“. Este es el mensaje que desde hace días difunden aficionados del Burgos CF en las redes sociales. Muestran su “rotundo rechazo” a que este futbolista vista su camiseta y defienda su escudo. Shon Weissman es un futbolista judío de 27 años que actualmente milita en el Granada, club de la Primera División española. En las últimas fechas se ha especulado con su fichaje por el equipo burgalés y parte de la afición quiere vetar el posible traspaso. En su boicot, aluden a los comentarios del delantero israelí sobre la guerra que libra su país contra Hamás en Gaza.

“Hay líneas que no deben cruzarse, y valores que mantener”, dice el colectivo llamado La Hinchada de Arlanzón. Estos aficionados burgaleses han confeccionado un cartel en el que aparece Weissman en blanco y negro con los ojos tapados y una banda roja que tacha su imagen. Junto a la foto del jugador —todavía con la camiseta del Granada— figuran presuntos comentarios que atribuyen a Weissman tras el atentado de Hamás que mató a 1.200 compatriotas el pasado 7 de octubre. “¿Qué razón lógica hay para que no se hayan lanzado ya 200 toneladas de bombas sobre Gaza?”, “Toda Gaza apoya el terrorismo, toda Gaza está muerta”, “¿Por qué Ezael no les dispara en la cabeza?”.

La Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) lleva semanas denunciando que la guerra en Gaza ha provocado un repunte del antisemitismo. Este organismo, que representa a los judíos españoles, cuenta con un observatorio en el que actualizan todos los ataques contra personas o intereses judíos. Incluyeron los gritos que Weissman recibió en el estadio de El Sadar de Pamplona el 20 de octubre, dos semanas después del atentado y el inicio de la guerra. El Granada disputó allí un encuentro contra Osasuna y sus seguidores profirieron consignas como “Weissman, muérete” y “Palestina Aurrera”. “Gritos antisemitas contra el futbolista Shon Weissman”, lamenta el comunicado de la FCJE.

La Liga también detectó esos cánticos y los recogió en el informe que elabora cada jornada sobre incidentes en los campos españoles. En el minuto uno de partido y en el 20, los aficionados más radicales del conjunto navarro “entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 10 segundos, el cántico, ‘Weissman muérete, Weissman muérete’, dirigido a un jugador perteneciente al equipo visitante, quien no se desplazó y por tanto no se encontraba en el terreno de juego, debido a motivos de seguridad”.

Denuncia a Antiviolencia

El informe añade que, “de acuerdo a la información de diversos medios de comunicación”, esos cánticos son “por el conflicto entre Israel y Palestina, dada su nacionalidad israelí y unas supuestas previas declaraciones del jugador sobre dicho conflicto”. Luego LaLiga remitió esa información al Comité de Competición de la RFEF y a la Comisión Antiviolencia. “Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y por tanto sancionables”, advierte la entidad que dirige Javier Tebas.

El Confidencial ha hablado con un miembro del grupo de aficionados del Burgos que impulsa el veto al jugador. Aclara que no son antisemitas y que su posicionamiento es contra los comentarios “inhumanos” de Weissman. “En Gaza se está cometiendo una atrocidad, se están bombardeando civiles y se están asesinando niños. No queremos que un jugador que hace eso vista nuestra camiseta”.

La Hinchada de Arlanzón agrupa a unos 700 integrantes y este portavoz afirma que no tienen noticias del club al respecto de un fichaje que, según dicen, se ha dado por hecho en los medios de comunicación. Los anteriores propietarios del Burgos CF han vendido el club el pasado 29 de diciembre a unos empresarios argentinos. “No sabemos a quién corresponde la idea de este fichaje, si a los anteriores dueños, a los nuevos o al director deportivo”, explican desde el grupo.

Weissman tiene una cuenta de X (antes Twitter) con más de 9.000 seguidores donde ya no aparecen mensajes sobre la guerra. También tiene una cuenta en Instagram, pero es privada y él elige quién puede seguirle. Medios locales en Granada informan que un grupo de palestinos llevó sus comentarios en redes sociales a la Fiscalía para que los investigara por un presunto delito de odio.

El jugador nunca ha ocultado sus creencias religiosas. En septiembre se dirigió a sus aficionados en las redes para anunciar que no podría disputar el partido que enfrentaba a su equipo contra Las Palmas con motivo de la festividad del Yom Kippur, la más importante del judaísmo: “Mis creencias me llevan a respetarlo y así lo he trasladado al club, cuerpo técnico y el vestuario, quienes han respetado mi decisión. Agradezco su apoyo y comprensión”. En ocasiones, el jugador ha celebrado sus goles tapándose la cara, como cuando se reza la Shemá, una de las oraciones más importantes de su credo.

Este periódico ha tratado de ponerse en contacto con Weissman a través del Granada, que este miércoles disputó y ganó un partido clave contra un rival directo por eludir el descenso como es el Cádiz. Desde el club nazarí no han accedido al que el jugador hable con El Confidencial apelando a distintos argumentos: “Ahora mismo no atenderá entrevista”, “No tenemos que valorar nada de otras aficiones”, “Todo lo que no sea sobre el partido, a partir de mañana”, “No es posible”. El Granada no aclara si ese silencio es decisión del jugador o de la entidad. El mercado de invierno de cara a un posible traspaso finaliza el próximo 31 de enero.