Váyase ya señor Guterres

Carta abierta al Secretario General de ONU con la esperanza de ser la última.

Señor

António Manuel de Oliveira Guterres

Secretario General de la ONU (por desgracia)

De mi consideración:

El título está dirigido a usted señor Gutérres, váyase ya.

Váyase de esa espantosa Organización de Naciones Unidas, entidad creada para ciertos fines y que en la realidad hace todo lo contrario.

Váyase de la ONU, donde usted únicamente hace daño incrustando en todos sus debates y todas sus decisiones los intereses repugnantes de lo que hoy es el socialismo en el mundo, o sea todo lo contrario a lo que los ideólogos del socialismo pretendían con sus teorías.

Váyase de la ONU como se lo pidió el embajador del Estado de Israel, y como lo desean todas las personas bien intencionadas y bien informadas del mundo.

Váyase ya y deje de pedir el cese de hostilidades en la guerra Israel – Hamás, porque el único motivo que tiene usted para pedir ese cese es porque ya ve perdida la guerra por el bando de terroristas de Hamás y Yihad Islámica, que es el que despierta sus simpatías. Y no sólo simpatías sino que trata de favorecerlos lo más posible abusando de ese cargo que malamente ocupa.

Ese cargo correspondería a una persona que obligatoriamente debe ser imparcial en política y especialmente en casos de enfrentamientos bélicos.

Usted está inhabilitado, incapacitado, impedido para el cargo. Usted pertenece a una rama fuertemente conservadora de la Iglesia Católica, donde fue y sigue siendo activo militante. Eso lo inhabilita, lo hace absolutamente parcial.

Usted pertenece al Partido Socialista desde su juventud hasta hoy. Eso lo inhabilita y lo parcializa dada la línea que a la fecha las izquierdas en el mundo -estúpidamente y contra su razón de existir- llevan obsesivamente contra el Estado de Israel. Si viviera Karl Marx se preguntaría cómo hace usted para ser a la vez dirigente socialista y activista en la Iglesia Católica. Se haría más preguntas viendo el accionar del socialismo en el mundo, abrazado con los enemigos más fervientes del socialismo como el ayatollah Alí Jamenei y el presidente de Irán Ebrahim Raisi, o aplaudiendo a dictadores asesinos que se autodenominan socialistas, algunos hablando del “socialismo siglo XXI” y otros que no mencionan el siglo porque seguramente planean dominar más de cien años.

Usted ejerció los cargos de Presidente del Partido Socialista de Portugal, Presidente de la Internacional Socialista, Primer Ministro de Portugal y Presidente del Consejo Europeo, TODOS CARGOS COMO MIEMBRO DEL PARTIDO SOCIALISTA. Por lo tanto está absolutamente descalificado para ser Secretario General de la ONU.

Como socialista, usted está defendiendo a los inmundos asesinos terroristas, cuya actitud el 7 de octubre fue asesinar, masacrar, violar, quemar vivos, degollar, desmembrar, raptar, a la población israelí de los alrededores de Gaza. Y da la casualidad que la mayoría de las víctimas israelíes adultas (no cuento los niños) era socialista, viviendo en granjas socialistas, perteneciendo a movimientos socialistas como el partido político Meretz o la organización Shalom Ajshav (Paz Ahora), y dando trabajo a miles de gazatíes como forma de luchar por la paz entre israelíes y palestinos. Como socialista no dice una palabra de cómo asesinan a los marxistas en países musulmanes y por supuesto mira hacia otro lado cuando se habla de las dictaduras de Corea del Norte, Venezuela, Cuba, Nicaragua y otras.

Le duele la muerte de palestinos, la gran mayoría con sangre en sus manos (o lanza cohetes y metralletas), pero no dice una sola palabra en beneficio de las víctimas israelíes.

No cause más daño señor Gutérres, ya son suficientes y más que suficientes los que usted hizo o ayudó a hacer desde que está en el cargo.

Si para los israelíes, el 7 de octubre será para siempre el “sábado negro“, qué nombre podemos darle al 1 de enero del 2017, día en que usted fue elegido para ese cargo?

Usted con sus actos constantemente le da la razón a la antigua sentencia de Tomás de Aquino: teme al hombre de un solo libro.

Para terminar, ya que son muchas mis cartas abiertas dirigidas a usted desde que ostenta ese cargo, que fueron publicadas en periódicos de muchos países, y para que usted lo vaya sabiendo ya que hay muchas cosas que usted ignora o no quiere ver, le dejo bien claro, que el Estado de Israel no parará hasta que el último de los terroristas de Hamás y Yihad Islámica haya muerto o esté entre rejas. Y no por venganza sino para evitar el huevo de la serpiente, para que otras organizaciones vean muy bien qué les espera si piensan hacer algo parecido a lo que hicieron estas hordas asesinas el 7 de octubre.

Me despido de usted con un hasta nunca.