El monumento que recuerda a las víctimas del campo de trabajo forzado de Jamlitz Liberose, en Alemania, fue profanado con grafitis y diversas inscripciones.
Liberose era un satélite del campo de concentración de Sachsenhausen, donde en febrero de 1945 más de 1.300 personas fueron asesinadas.
Las autoridades del gobierno del Estado de Brandemburgo, la Fundación Memorial de Brandemburgo y la Iglesia Evangélica de Berlín-Brandeburgo-Silesia Alta Lusacia quedaron consternadas ante la profanación.
La ministra de Cultura del Estado de Brandemburgo, Manja Schüle, expresó que el sitio “no es solo un monumento, también es un lugar donde se derramó sangre judía. El ataque, por lo tanto, no es solo un ataque a la memoria de los crímenes nacionalsocialistas. Es una profanación de este lugar especial».
Por su parte, la Fundación Memorial de Brandemburgo declaró que “cualquier forma de antisemitismo debe ser perseguida sin descanso”; y la Iglesia Evangélica dijo que era una pena que los grafitis antisemitas volvieran a estar en la agenda pública.
En el subcampo de Liberose, que las SS establecieron en 1943, unas 10.000 personas tuvieron que realizar trabajos forzados en condiciones inhumanas, la mayoría de ellas eran judíos de Polonia y Hungría. En 2003 se estableció aalí el Centro de Documentación y Conmemoración Jamlitz-Liberose.
La policía alemana ya identificó y arrestó a tres sospechosos, dos hombres de 20 años y una mujer de 18 que están siendo acusados por daños a la propiedad y sospecha de incitación al odio.
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